El influyente medio británico analizó el nuevo rumbo económico de la Argentina y sostuvo que, bajo la gestión de Javier Milei, el país está más cerca que nunca de consolidarse como una economía normal. Sin embargo, alertó sobre posibles obstáculos políticos y la incertidumbre global.
En un extenso editorial titulado “La gran jugada de Javier Milei para normalizar la economía argentina”, la revista británica The Economist realizó un balance del rumbo económico emprendido por el presidente Javier Milei, subrayando los avances alcanzados en sus primeros meses de gestión, aunque sin omitir advertencias sobre los riesgos que aún enfrenta el país.
“El historial de Milei da cierta credibilidad a su insistencia de que esta vez será diferente”, sostiene el artículo, que remarca los logros del Gobierno tras arduas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y una profunda reestructuración del gasto público. “Muchos de los 22 programas anteriores de Argentina con el FMI terminaron en fracaso”, recordó el semanario, al tiempo que destacó la firmeza del presidente para implementar ajustes difíciles.
The Economist subrayó que Milei asumió un país con un “gasto público descontrolado, una inflación disparada y múltiples tipos de cambio”. Frente a este panorama, el presidente aplicó un fuerte recorte del gasto estatal, lo que derivó en una reducción sostenida de la inflación. También se mencionó el descenso de la pobreza del 53% a comienzos de 2024 al 38% en la actualidad, un dato que —según el medio— resulta significativo en términos sociales y políticos.
En paralelo, el artículo apuntó que el plan económico avanza hacia una nueva etapa con la flexibilización del cepo cambiario, lo que representa “el punto más débil” del programa. “Nunca estuvo tan cerca de convertir a Argentina en una economía normal”, expresó The Economist, aunque agregó que la volatilidad global y los desafíos políticos internos podrían poner en jaque esta transformación.
La publicación también valoró el reciente acuerdo con el FMI y el desembolso inicial de USD 12.000 millones, que permitirá al Banco Central reforzar sus reservas y defender un esquema cambiario más libre. A pesar de ello, advirtió que la estrategia es “audaz, pero arriesgada”, ya que la eliminación de controles puede incentivar inversiones, pero también fugas de capital.
En este contexto, se mencionó que el peso argentino cayó un 12% en un solo día, aunque sigue considerado sobrevaluado por consultoras internacionales como Capital Economics.
Sobre la perspectiva internacional, el editorial no evitó hacer mención a la reactivación de la guerra comercial liderada por Donald Trump —quien busca un segundo mandato presidencial— y cómo sus políticas arancelarias podrían perjudicar el valor de las exportaciones argentinas, particularmente en productos agrícolas y petróleo.
También interpretó como un “gesto de respaldo” la reciente visita a Buenos Aires del secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, quien se reunió con el ministro de Economía, Luis Caputo.
En el plano local, The Economist advirtió que el respaldo social al mandatario, si bien sigue siendo del 45%, ha comenzado a erosionarse. Y señaló que el avance electoral del peronismo podría inquietar a los mercados: “Ninguna reforma estructural es más importante para Argentina que abandonar las políticas económicas del peronismo radical”, citó al economista Alejandro Werner, del Peterson Institute.
Asimismo, alertó sobre la debilidad política de Milei, con escasos aliados parlamentarios y tensiones aún no resueltas con el espacio del expresidente Mauricio Macri. “Una gran victoria peronista en la provincia de Buenos Aires podría alarmar a los mercados”, advirtió Ignacio Labaqui, de Medley Advisors.
El análisis concluye con una mirada esperanzada pero cauta: “El camino es difícil, pero por ahora, de manera sorprendente, Milei parece más cerca que nunca de lograr su transformación económica”. Infobae