El miércoles 18, en el Museo Regional Aníbal Cambas de Posadas, se llevó a cabo la presentación oficial del libro “Historias y relatos desordenados”, escrito por el Dr. Lloyd (II) Jorge Wickström. Este destacado trabajo documenta la inmigración sueca en la región de Oberá y su impacto en el desarrollo social y cultural de Misiones. Wickström, un apasionado historiador y médico, relata en dos volúmenes la travesía de los colonos suecos y las vicisitudes que enfrentaron desde su llegada a Sudamérica.
Durante una entrevista en Radio Tupa Mbae, Wickström destacó la importancia de rescatar el legado de aquellos pioneros que, desde 1891, contribuyeron al crecimiento de localidades como Yerbal Viejo y Oberá. El autor subrayó cómo los inmigrantes suecos, con su arduo trabajo, lograron crear caminos, fundar la Escuela Nacional N° 84 y establecer diversas instituciones que fueron fundamentales para el progreso de la zona. “No había ni un policía en 1917 en Yerbal Viejo, pero la comunidad, unida, logró la creación de un destacamento, y poco después, una subcomisaría”, comentó Wickstrom.
Uno de los capítulos más emotivos del libro aborda la historia del desarrollo de Oberá como ciudad. El autor explicó a La Creíble FM 105.9 cómo el esfuerzo de Carlos J. Peterson, un sueco visionario, fue clave para la creación de una pista de aterrizaje y la instalación de los primeros teléfonos en la década de 1930. Estos logros reflejan el espíritu emprendedor de la comunidad sueca, que no solo se enfocó en el desarrollo material, sino también en el bienestar cultural y social, promoviendo la creación de cines y clubes sociales en la región.
Wickström también relató cómo su padre, periodista y fundador del bisemanario El Vocero Regional en 1939, influyó en su pasión por la historia y la investigación. A través de documentos históricos recuperados de la casa de su abuelo, Wickstrom pudo reconstruir detalles inéditos sobre la fundación de Oberá y la contribución de los inmigrantes suecos a su desarrollo. Entre ellos, destaca la donación de terrenos para el primer cementerio por parte de Carlos J. Peterson y la creación de la primera biblioteca y estafeta postal, gracias a la generosidad de Hermann Karlsson.
El libro no solo es un homenaje a los inmigrantes suecos, sino también un reflejo del crecimiento rápido y constante de Oberá. Desde la creación de la Escuela N° 185 hasta la declaración oficial de Oberá como ciudad en la década de 1960, Wickström narra cómo cada avance traía consigo nuevas demandas de infraestructura y servicios. “A medida que crecía el pueblo, crecían las necesidades. Así fue como se crearon escuelas, cines y más adelante, un colegio secundario”, agregó.
El autor también compartió anécdotas personales, como la visita del célebre actor Hugo del Carril a Oberá para filmar la película Las aguas bajan turbias, resaltando la importancia de preservar estos recuerdos como parte del patrimonio cultural de la región.
“Historias y relatos desordenados” es más que un libro de historia, es un testimonio vivo del esfuerzo, la perseverancia y la unidad de una comunidad que dejó una huella imborrable en Misiones. Con una narrativa rica en detalles y una profunda investigación, Wickström invita a los lectores a conocer y valorar el legado de los suecos en Argentina.