Salario mínimo: con un ojo puesto en el gasto social, el Gobierno lo subirá por decreto tras la falta de acuerdo


El escenario político y económico en Argentina se ve envuelto en una nueva controversia tras la falta de acuerdo en la reunión entre gremialistas y cámaras empresarias respecto al salario mínimo.

A pesar de las declaraciones del presidente Javier Milei, quien descartó la posibilidad de que el Gobierno estableciera un monto por decreto, fuentes oficiales indicaron que se determinará una subida del piso de remuneraciones durante esta semana.

La subida del salario mínimo tendrá un impacto directo en los montos de algunos programas sociales, lo cual se torna relevante en un contexto de aumento de la pobreza en el primer mes del año debido a la escalada inflacionaria. Esta decisión se enmarca en el laudo de la presidencia del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, bajo la órbita de la Secretaría de Trabajo, que se estima que tendrá lugar entre el martes y miércoles de la presente semana.

Si bien aún no se ha establecido el nuevo monto, se espera que esta subida impacte significativamente en las cuentas públicas. La mayoría de los convenios colectivos de trabajo ya pagan sueldos mínimos por encima del piso vigente, lo que implica que el efecto más notorio recaerá en el Estado y en los programas sociales, como el Potenciar Trabajo, las Becas Progresar o el seguro de desempleo, cuyos montos se ajustan de acuerdo a la variación del salario mínimo.

Aunque las cifras exactas aún no se han definido, se asume que el incremento será menor al 85% que reclamaban las principales centrales obreras. Un aumento de esta magnitud permitiría al salario mínimo recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos ocho años. Según estimaciones, con la nominalidad actual, los $156.000 del salario mínimo vigente superarían los casi $273.000 del piso remunerativo a fines de 2015.

Este aumento implicará un costo fiscal para el Estado, especialmente en programas sociales como el Potenciar Trabajo, que beneficia a 1,2 millones de personas. La Casa Rosada busca recortar partidas para este rubro del gasto, considerado irregular por tratarse de asistencia social “intermediada” por organizaciones sociales.

La falta de acuerdo en la reunión del Consejo del Salario generó críticas por parte de la CGT, que cuestionó la actitud del Gobierno y de las cámaras empresarias. La decisión final del laudo gubernamental tendrá un impacto crucial en las cuentas públicas, en un contexto donde el equipo económico busca mantener a raya el déficit fiscal para alcanzar el equilibrio financiero en el primer año de mandato del gobierno actual.

La intención del Gobierno de avanzar hacia el déficit cero se reflejó en el superávit primario registrado en el primer mes del año. Sin embargo, el ajuste en el gasto primario, especialmente en el ámbito de las partidas sociales, ha sido motivo de debate y controversia en el país.

La definición del nuevo salario mínimo no solo afectará a los trabajadores, sino que tendrá repercusiones significativas en el tejido social y económico argentino. Con información de Infobae