El lunes, el Seminario Diocesano Santo Cura de Ars fue escenario de la Misa de Acción de Gracias, presidida por los obispos de Posadas, Oberá e Iguazú. En un diálogo con el Padre Alejandro Cañete, conductor del programa Caminando juntos por Radio Tupa Mbae, el recientemente ordenado Presbítero Esteban Vera, actual Prefecto del Seminario, compartió su experiencia y los desafíos cotidianos en la formación de los futuros sacerdotes.
El Padre Vera, al frente de los jóvenes del preseminario e introductor, destacó la experiencia formativa tanto para los seminaristas como para los propios formadores. “Uno va aprendiendo a ser formador. No venimos ya preparados, sino que vamos aprendiendo junto con ellos”, afirmó.
La vida en el seminario: formación integral y colaboración comunitaria
Actualmente, el Seminario cuenta con 28 jóvenes, de los cuales 10 pertenecen a la etapa inicial del preseminario e introductor. El Padre Vera explicó que la vida en el seminario abarca diversas dimensiones: la formación espiritual, pastoral, intelectual y humana. Cada día inicia a las 6:30 con la oración personal y comunitaria, continúa con la Misa diaria, el desayuno y las actividades formativas y laborales.
Por la mañana, los teólogos asisten a clases mientras los estudiantes de filosofía realizan trabajos asignados, y por la tarde se invierten las tareas. Entre las responsabilidades cotidianas, los seminaristas se encargan del mantenimiento del edificio: “Nos toca cortar el césped, podar árboles, limpiar los pisos y hasta levantar muros, como el que ven al fondo, que fue construido por los chicos”, detalló con orgullo.
Asimismo, subrayó la colaboración de la comunidad en el sostenimiento del seminario, que recibe aportes a través de las oraciones, donaciones de alimentos y productos de higiene, y el tradicional bono contribución distribuido en las parroquias. “Toda ayuda es importante. Es como sostener una casa, donde se cocina, se estudia y se convive. Por eso damos gracias a todas las personas que nos acompañan”, expresó.
El llamado vocacional: un mensaje a los jóvenes
Dirigiéndose a los jóvenes que sienten el llamado al sacerdocio, el Padre Vera enfatizó: “El mejor lugar para discernir una vocación es el seminario. Allí cuentan con la Misa diaria, el acompañamiento espiritual y formadores que los escuchan y guían en el proceso de decisión. No tengan miedo de decirle sí al Señor”.
Para quienes estén interesados, se los invitó a acercarse al seminario (Av. Alem Nº 3157) o a través de sus redes sociales (Instagram y Facebook) para obtener más información sobre el camino vocacional.
Para finalizar la entrevista, debido a la cercanía del inicio de la Misa de Acción de Gracias —celebración que simbolizó la unión de toda la Iglesia diocesana en oración por las vocaciones y el futuro del seminario—, los sacerdotes reflexionaron: «Seminario significa semillero, el lugar donde nacen y crecen las vocaciones, las semillas del sacerdocio». Además, alentaron a toda la comunidad a seguir apoyando y rezando por los futuros pastores.