En una muestra de solidaridad hacia Jerusalén, Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido, Japón, Canadá e Italia, representantes de las democracias más avanzadas del mundo, han manifestado su pleno respaldo ante el reciente ataque a Israel por parte de Irán. Además, han advertido a Irán que se tomarán medidas ante cualquier iniciativa desestabilizadora en la región.
El G7, en una reunión por videoconferencia, condenó enérgicamente el ataque iraní, destacando el riesgo de una escalada regional incontrolable. En un comunicado conjunto, los líderes expresaron su firme compromiso con la seguridad de Israel y su rechazo a cualquier acción que ponga en peligro la estabilidad en Medio Oriente.
La declaración conjunta resaltó la necesidad de poner fin a la crisis en Gaza, abogando por un cese al fuego inmediato y sostenible, así como por la liberación de los rehenes por parte de Hamas. Asimismo, se comprometieron a fortalecer la asistencia humanitaria a los palestinos afectados por el conflicto.
La Presidencia italiana del G7 convocó esta reunión de emergencia después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, expresara su apoyo a Israel y solicitara una respuesta coordinada del grupo ante la situación en Medio Oriente.
Este encuentro marca un paso importante en la búsqueda de una solución diplomática y una mayor estabilidad en la región. La comunidad internacional, incluida la Santa Sede, continúa instando al diálogo y a la búsqueda de la paz en un contexto marcado por la incertidumbre y la tensión.
El mundo entero sigue con atención los acontecimientos en Medio Oriente, en un esfuerzo por promover la paz y la justicia en una región afectada por décadas de conflicto y sufrimiento.