El Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, y la Ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, anunciaron hoy un conjunto de iniciativas destinadas a enfrentar el preocupante hacinamiento en las comisarías porteñas. Estas medidas incluyen la creación de nuevos módulos de detención, la implementación de tobilleras electrónicas y la reanudación de la construcción de una cárcel en Marcos Paz.
El anuncio se produce en medio de tensiones políticas desatadas por la reciente fuga de ocho presos de la Alcaidía Número 1 de San Telmo el pasado 1 de abril. Este incidente intensificó el debate sobre la responsabilidad del Gobierno Nacional en el manejo del sistema penitenciario y la necesidad de aliviar la presión sobre las comisarías de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En respuesta a esta situación, el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, subrayó la importancia de buscar soluciones concretas y urgentes. “Una comisaría no está diseñada para alojar detenidos durante días, esto genera múltiples preocupaciones”, declaró Macri durante una entrevista radial.
Por su parte, Patricia Bullrich expresó su compromiso con encontrar una solución efectiva al problema del hacinamiento. Sin embargo, las discusiones entre ambos líderes políticos han sido intensas, reflejando la complejidad del desafío.
El plan presentado por Macri consta de tres pilares fundamentales: la creación de nuevas alcaidías y módulos de detención en la Ciudad, la incorporación de tobilleras electrónicas para monitorear a los detenidos, y la aceleración de procesos de extradición para reclusos extranjeros condenados.
Además, se retomarán las obras del Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz, con el objetivo de trasladar a los presos de la cárcel de Devoto, una medida acordada entre la Ciudad y el Gobierno Nacional.
El anuncio de estas medidas se produce en un contexto político complejo, con tensiones internas en el PRO y un escenario marcado por la rivalidad entre distintos actores del partido. La foto de Jorge Macri y Patricia Bullrich juntos representa un gesto de distensión política, así como un compromiso conjunto para abordar los desafíos de seguridad y la situación carcelaria en la Ciudad de Buenos Aires.
El plan presentado por el Jefe de Gobierno y la Ministra de Seguridad busca no solo resolver una problemática concreta, sino también contribuir a la estabilidad política interna del PRO y a la convivencia con otros actores políticos dentro del espacio. Infobae