El próximo 25 de mayo, el Palacio de Justicia de la ciudad de Córdoba se convertirá en el epicentro de un evento trascendental: el Pacto de Mayo. Encabezado por Santiago Caputo, asesor presidencial, y Karina Milei, secretaria general de la Presidencia, este encuentro busca dotar de un aura estética imponente al acuerdo nacional que el líder político Javier Milei desea firmar con gobernadores de todo el país.
La elección del lugar no fue una decisión ligera. A pesar de la oferta inicial del Centro de Convenciones Juan Manuel Bustos por parte del mandatario cordobés Martín Llaryora, Caputo y su equipo rechazaron esta opción en favor del Palacio de Justicia, ubicado en Caseros 551, inaugurado en 1936 y con una rica historia que incluye la presencia de figuras emblemáticas como Pedro Frías y Julio Argentino Roca (h). Este edificio, que alberga los restos del exministro Dalmacio Vélez Sarsfield, cuenta con espacios majestuosos como el salón de los Pasos Perdidos, adornado con 24 columnas y cuatro estatuas del artista Troani.
Pero la grandeza del evento no se limita a lo visual. Caputo planea conferirle una mayor institucionalidad al Pacto de Mayo, proponiendo condecorar a los gobernadores que suscriban el pacto con la prestigiosa Orden de Mayo, tradicionalmente otorgada a personalidades extranjeras. Las medallas están listas, aunque se espera la aprobación de un decreto para formalizar su entrega a los mandatarios provinciales.
Sin embargo, la convocatoria al evento no es indiscriminada. Karina Milei ha decidido condicionarla a la sanción de la Ley Bases y el paquete fiscal, afirmando que “los que se porten bien con el Gobierno van a estar invitados”. Este enfoque selectivo busca asegurar el compromiso de los gobernadores con las políticas propuestas por el Ejecutivo.
Además del evento principal, el Gobierno contempla la posibilidad de convocar a una comisión de ministros provinciales para abordar temas previsibles, tributarios y económicos antes de la firma oficial del pacto el 25 de mayo.
El contenido del acuerdo, propuesto por el Ejecutivo, abarca una amplia gama de temas, desde la propiedad privada y el equilibrio fiscal hasta la reforma laboral y la apertura al comercio internacional. Sin embargo, aún queda por definir qué punto reemplazará a la reforma política, aunque desde Balcarce 50 aseguran que buscarán avanzar en la sanción de algunos de estos puntos después del mes de mayo, incluso si no forman parte del acuerdo nacional.
Con columnas romanas y medallas ceremoniales, el Pacto de Mayo promete ser un hito en la historia política argentina, donde la estética y la institucionalidad se unen para forjar un nuevo capítulo en el país. Con información de TN y portada de Reuters