El Papa Francisco invita a rezar por los ‘peregrinos de la esperanza’ en diciembre, a puertas del Jubileo 2025


El Sumo Pontífice ha elegido como intención de oración para el mes de diciembre un poderoso llamado a la esperanza cristiana, en el marco de la preparación para el Jubileo 2025. En su mensaje, el Pontífice anima a los fieles a rezar por los “peregrinos de la esperanza” y a pedir que este Jubileo fortalezca la fe de todos los cristianos, ayudándoles a reconocer a Cristo resucitado en sus vidas cotidianas.

“La esperanza cristiana es un regalo de Dios que llena de alegría nuestra vida. Y hoy la necesitamos tanto, ¡el mundo la necesita tanto!”, expresa Francisco en el video del Papa, lanzado a través de la Red Mundial de Oración del Papa y en colaboración con el Dicasterio para la Evangelización. En él, el Santo Padre invita a los fieles a ser testigos de esa esperanza en un mundo marcado por la desesperanza y la desconfianza.

En sus palabras, Francisco recuerda que la esperanza cristiana no solo es una virtud, sino también un ancla que nos sostiene. “La esperanza es un ancla, que tirás con la cuerda y arraiga en la playa. Y nosotros tenemos que estar aferrados a la cuerda de la esperanza”, señala, utilizando la imagen de la barca de la Iglesia, que representa el viaje de los cristianos hacia la salvación.

El video de este mes refleja uno de los temas centrales del pontificado de Francisco: la esperanza en medio de la adversidad. El Papa señala que la esperanza es una fuerza que nos da valor para avanzar en la vida, como lo demuestra el ejemplo de Abraham, quien, sin temer a la realidad, confió en lo imposible. De manera similar, el video presenta a dos mujeres que, enfrentando sus propias dificultades y preocupaciones, encuentran en su camino a otros «peregrinos de esperanza», quienes las acogen y las invitan a caminar con ellos hacia la Puerta Santa del Jubileo.

El mensaje de Francisco resalta que el Jubileo 2025, cuyo lema será “Peregrinos de la esperanza”, representa no solo un tiempo de celebración y reflexión, sino también una oportunidad para renovar la esperanza en Cristo. Este Año Santo será un llamado a caminar juntos en la fe, a reconocer a Cristo resucitado en nuestras vidas y a fortalecer esa esperanza, especialmente en un mundo que atraviesa tiempos de incertidumbre.

“Llenemos nuestro día a día con el don que Dios nos da de la esperanza, y permitamos que a través de nosotros llegue a todos cuantos la buscan”, concluye el Papa en su mensaje, invitando a todos a ser portadores de esperanza en un mundo necesitado de ella.

Este llamado a la oración y reflexión, en el marco del Jubileo 2025, destaca la importancia de vivir la esperanza cristiana no solo como una virtud personal, sino también como un acto de comunión con los demás, caminando juntos hacia la puerta de la misericordia y la salvación que se abrirá durante el Año Santo. AICA