Como todos los viernes la directora de Cáritas Diocesana Lic. Minerva Gamarra visitó los estudios de Radio TupaMbaé para hablar sobre el trabajo que vienen realizando. En esta oportunidad presentó por medio de testimonios, cómo Cáritas Diocesana y las Cáritas parroquiales, asistieron en los diferentes asentamientos a las familias que sufrieron inundaciones en su casa el fin de semana pasado.
A su vez, Gamarra invitó a todos a “visitar la página de Facebook de Cáritas Argentina Posadas Misiones para ver las fotos de todas las actividades que realizan todas las semanas en conjunto con todo el equipo de trabajo de Cáritas diocesana.
En primer lugar, la directora de Cáritas Diocesana relató: Arrancamos el viernes 1º de septiembre con la acción de todas las personas de buena voluntad que colaboraron y asistieron a las personas que fueron afectadas por el temporal, por las cuales estamos en oración todavía, con este pronóstico que no es nada alentador, pero confiamos en que el Fenómeno del Niño va a bajar la intensidad y vamos a poder seguir ayudando y compartiendo”.
“Se viene la temporada del Niño, que como todos sabemos, es una temporada de mucha lluvia. Sin embargo esperamos que solamente sea eso, agua y no en tanta abundancia como fue el fin de semana pasado, en donde hubo mucho anegamiento, muchos barrios inundados en lo que es Posadas”.
También hubo en algunas localidades del interior de la provincia, pero principalmente acá en Posada fueron nuestros barrios y nuestra familia las que más se vieron perjudicadas por el temporal.
Luego, Gamarra indicó que ese “es el tema que vamos a estar compartiendo hoy, el trabajo que se vino haciendo Cáritas Diocesana, desde las diferentes Cáritas parroquiales que tenemos en nuestra diócesis, y que tenemos acá en la zona 2 de Posadas, que es la más grande “
“También, en nuestro Facebook pueden seguir de cerca, el trabajo en nuestras demás acciones. Porque estuvimos acompañando a las diferentes Cáritas con diferentes donaciones y estuvimos viendo proyectos, porque seguimos también con nuestro Proyecto de Vivienda tan importante ahora con el temporal”, añadió.
Acto seguido, la directora de Cáritas Diocesana presentó el testimonio de Gisela del Coro “que es nuestra referente de Cáritas de Cura Brochero» que contó cómo una de sus comunidades que es Nuestra Señora de Itatí, en el barrio Cruz del Sur, estuvo afectada por las inundaciones”.
De esta manera, Gisela del Coro, se presentó y dijo que pertenece a la comunidad Santo Cura Brochero del barrio Itaembe Guazú:
“Soy referente de Cáritas en dicha comunidad y en el día de las inundaciones y de las lluvias, una de nuestras comunidades, Nuestra Señora de Itatí del barrio Cruz del Sur, fue gravemente afectada por las inundaciones, por un arroyo que su nombre es el Arroyo Apepú, por la fuerte creciente de este que causó muchas inundaciones a muchas familias”.
Y que por la providencia de Dios y gracias a la solidaridad de la comunidad de los padres de la Catequesis, de vecinos allegados, de otras comunidades como San Miguel, de San Benito que estuvieron otorgándonos de su ayuda.
También quiero recalcar el apoyo y la presencia de nuestro delegado municipal, Martin Burgos, que estuvo acompañando en todo momento. Gracias a Dios, en un momento tuvimos que parar con las donaciones porque la verdad que la Providencia se manifestó grandemente en alimentos, ropas, colchones, mantas, juegos, de todos lados nos llovía mucha bendición y queremos agradecer mucho a cada persona que se dispuso y se tomó su tiempo en colaborar con nosotros.
Por consecuencia de la solidaridad de muchos, “hoy cada familia está en su casa con un colchón nuevo, con una manta nueva, con alimentos para poder pasar en estas semanas, con calzados secos, con medias. La verdad que muy agradecida por esta Divina Providencia que Dios se manifestó en nuestra comunidad”.
Después del testimonio de Gisela del Coro, la Lic. Gamarra presentó el audio de José Dávalos, uno de los Coordinadores de la Zona 2, quien contó “qué se le pasó por la mente cuando vieron que había problemas y que sus hermanos estaban pasando un mal momento”. Al respecto José se presentó y dijo:
Hola, soy José de la comunidad San Benito. Y el viernes a la noche, después de que pararon un poco las lluvias torrenciales, hubo muchos barrios inundados, especialmente la zona de Cruz del Sur, de Nemesio Parma. Allí, hay una capilla: Virgen de Itatí y la coordinadora de Cáritas de ahí, es María.
Y como estoy en la zona 2, hablé con Griselda y ella empezó a pedir donaciones en la parroquia San Miguel y fue acá en San Benito y le decía a la gente que si podían quedar en San Benito y de ahí iban a llevar hacia Cruz del Sur el sábado. Y hasta la 11 estuvimos juntando. Griselda también estuvo juntando en su comunidad y luego llevamos los dos, las donaciones de la gente que fueron solidarias con esa persona que sufrieron este mal tiempo.
Y María me dijo que iba a llevar a las personas que estaban parando en su casa, inundada de agua. El agua le llegaba hasta cerca de la rodilla, además del barro. A esas personas que no querían salir de su casa la asistíamos, el día sábado, y cerca del medio día, le llevamos eso.
Agradezco a Dios por la gente y su solidaridad que hay y también agradezco a Griselda que ella también me ayudó, porque muy importante su ayuda, su solidaridad con las Cáritas de esta zona, detrás de los puertos. Y doy gracias a Dios a eso.
A la vez le pedo a Dios por esta gente que está siempre en dificultades, para sea asistida por el hermano, por el gobierno -si puede asistirla- y es todo lo que puedo decir. Agradezco a la gente más que a nadie”.
Seguidamente, la directora de Cáritas Diocesana presentó el testimonio de Griselda Venegas, Animadora diocesana de la zona 2, quien contó cómo activaron la solidaridad para poder ayudar a Cruz del Sur, porque ellos estaban trabajando en esa zona. Sobre este tema Griselda comentó:
“Hola, soy Griselda, coordinadora de Cáritas Parroquial San Miguel y paso a contarles y a compartir la tarea que fuimos realizando este fin de semana en donde las familias más carenciadas fueron afectadas por este temporal, por las abundantes lluvias.
En principio, al enterarnos que estaban afectados con esta problemática, comenzamos a pedir ayuda y a pedir donaciones a los diferentes grupos parroquiales. Y como referente de la zona 2, nos unimos dos parroquias y empezamos a pedir donaciones y a centralizar en una Cáritas y de ahí, a distribuir las donaciones, en los distintos vehículos, a las diferentes zonas.
Nosotros visitamos particularmente Cruz del Sur y la Chacra 189 y 190 que está en Além y Jauretche, donde la comunidad estuvo muy presente junto al párroco y los diferentes grupos parroquiales estuvieron presentes también.
La asistencia consistió en hacer merienda, almuerzo y también en hacer un roperito para todas las donaciones (que la gente nos traía), para poner en ese lugar y para que las personas puedan venir a buscar ropa seca y calzado seco para sus familias.
En ese mismo contexto, diferentes grupos íbamos visitando las casas de cada uno para ver cuál era su necesidad. Así fuimos distribuyendo colchones, frazadas, alimentos no perecederos y también invitando a los que tenían niños, a toda la familia en realidad, a compartir un chocolate y el almuerzo que hicieron los días sábado y domingo.
El día lunes pudimos llevar a varias casas, el almuerzo. Y a la noche, también estuvimos repartiendo mercadería y viendo a las personas que ya fueron afectadas el día sábado, para ver cómo seguía su situación y poder seguir ayudándolos desde donde podíamos; sacando el agua o bien evacuando a estas personas y llevándolos a diferentes lugares, en donde los vecinos muy amablemente se ofrecían, para que estas personas puedan pasar la noche ahí.
Así fue nuestra tarea este fin de semana. Pero la tarea no termina acá, la tarea continúa. Seguiremos visitando a las diferentes familias y seguiremos ayudando desde nuestro lugar para mejorar esa calidad de vida. También acompañando desde el amor, y diciendo aquí estamos.
Un agradecimiento a toda la comunidad, también a los supermercados que han dicho presente con sus donaciones de mercadería. Así que, seguimos caminando juntos como comunidad. Bendiciones”.
Para complementar la información a partir de los testimonios, la directora de Cáritas Posadas amplió que la acción de Cáritas diocesana y de los referentes “fue un trabajo enorme e intenso. Además de la gente que colaboró con el amor y el compromiso con el que se movieron que es para destacar”.
“Nosotros como Cáritas diocesana estuvimos viendo que ya estaban cubiertos estas dos zonas, que «Los Oleritos» ya estaban atendidos y siempre tenemos presente al asentamiento «San Juan Diego», porque «San Juan Diego» en la forma en la que está localizada el barrio, una parte está en un pozo como en una olla y se le conoce justamente como “La Olla”, en donde las familias estaban totalmente inundadas porque precisamente funcionaba como una olla y embolsó todo el agua. Estaban totalmente inundados”, recordó.
A su vez. Gamarra indicó que “el Padre José María se comunicó con el Padre Beto Barros el viernes a la noche, y que nosotros el sábado a la mañana estuvimos ahí entregando mercaderías.
Posterior a su relato, Minerva Gamarra presentó el testimonio de Rogelio quien contó cómo vivieron esto y cómo Cáritas estuvo acompañando. De esta manera, José testimonió:
“Buenos días, mi nombre es Rogelio Peralta, soy colaborador con el Padre José María Ferreira en la comunidad San Juan Diego. Durante esta situación que ocasionó las tormentas, comenzamos a trabajar con el equipo de la Vicarías, recorriendo el barrio San Juan Diego, específicamente el lugar llamado La Olla, donde hicimos un relevamiento de todas las personas damnificadas.
Ahí pudimos encontrar que a la mayoría de las personas, en su casa, el agua ingresó, ya que, como el lugar lo dice la olla, allí se formó una gran laguna donde perdieron todas sus pertenencias. Algunas, salieron y fueron a la casa de algunos familiares y algunos se quedaron ahí.
La capilla tiene un salón donde está disponible para que algunos de ellos fueran a estar ahí para escaparse de la humedad. Pero la mayoría de las personas no quería salir de sus de su casa, por miedo a que le roben las pocas cosas que tiene.
Por suerte también tuvimos repartiendo algunos alimentos que teníamos y como se quedaron con toda la ropas mojada, también pudimos repartir ropa seca, a las personas.
Pero gracias a Dios, llegó también el apoyo de Cáritas Diocesana, que nos trajeron buenos alimentos, ropas para reforzar y para repartir a la gente. El problema era que era mayor la acumulación de agua. Entonces, se necesitaba hacer una canaleta para poder drenar, y para que las casas se queden sin agua. Entonces, gracias al trabajo a través del padre Barros de Cáritas que fue quien hizo una articulación con las autoridades de la Municipalidad y se consiguió una máquina para poder realizar la canaleta que se necesitaba para poder drenar el barro.
Gracias a Dios bueno eso ya en el transcurso de la tarde se consiguió y ahí eso ayudó muchísimo a la comunidad para que pueda secarse el espacio y cada uno pueda volverse a su casa.
Aparte de eso también la situación se complicaba más porque los alimentos que se repartían a la persona tampoco ellos podían elaborar porque las casas estaban todas mojadas y no podían elaborar los alimentos. Entonces tuvieron que articular con el ejército y con la municipalidad, para que al mediodía y a la noche se le acercaran las comidas para ellos, tanto el almuerzo como la cena.
Así que valoramos mucho el trabajo de Cáritas Diocesana por como hizo el trabajo articulando con las instituciones del Estado. Estamos muy agradecidos y aparte de eso también siguen ayudando. Además, estamos monitoreando para ver cómo sigue la evaluación del barrio, e inclusive tuvimos también la visita del obispo de Posadas, Mons. Juan Rubén Martínez que estuvo recorriendo y visitando las casas, y viendo todas las necesidades que tiene cada familia.
Así que estamos muy agradecidos y valoramos mucho la ayuda que nos brindaron tanto las comunidades del barrio como también Cáritas Diocesana”, cerró.
Para finalizar con el Bloque de Cáritas en Radio TupaMbaé, la directora de Cáritas Diocesana, agregó que en este último barrio y en la zona que se conoce como «La Olla», “son unas 120 familias que están ubicadas en el pozo, pero que después el barrio, es mucho más grande y estas familias también están totalmente inundadas”.
En este sentido contó que “el sábado a la mañana, el Padre Barros recibió el llamado por parte del vicegobernador de Misiones, preguntando qué barrios por ahí se le habían escapado del radar y que ellos no estaban registrando que contaban con problemas y ahí apareció el nombre de San Juan Diego, que nosotros desde Caritas ya sabíamos que estaba en esa situación y que no estaba siendo muy mediatizada la problemática que ocurría ahí”.
Y explicó que “así, se visibilizó la realidad del barrio y se llevó ayuda, logrando abrir esta canaleta con la gestión del intendente que también después se comunicó con el padre Barros para ver la situación de esa comunidad y llevarle la comida a través del ejército que también estuvo repartiendo comida a todos los barrios afectados y también ellos no estaban en conocimiento de que este barrio necesitaba ayuda”.
La situación de muchos asentamientos como este, “es muy compleja porque cuando la gente se encuentra con esta situación de inundación tiene miedo de perder lo poco que tiene y si eso le vuelve a ocurrir, es lamentable, porque son casitas muy precarias, con techo de lona, y la situación en este lugar todavía es irregular”.
“Entonces están en espera de negociaciones, de que se regularice la situación y hay personas que están trabajando en eso. Pero hasta ahora la situación de ellos es irregular en ese terreno”, concluyó.