El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, fue víctima del robo de su teléfono celular durante un acto institucional realizado en el municipio de La Cocha, en el sur de la provincia. El hecho ocurrió el miércoles 18 de junio por la tarde, luego del almuerzo, cuando el mandatario descendía del escenario para saludar a vecinos y militantes locales.
En medio de la multitud y los pedidos de fotografías, una mujer logró sustraer el dispositivo del bolsillo del saco del gobernador. La ausencia del celular fue advertida por Jaldo al subir a la camioneta oficial, lo que motivó la intervención inmediata de su equipo de seguridad y de efectivos policiales presentes en la zona.
Gracias a las imágenes captadas por un fotógrafo durante el acto, se logró identificar a una mujer con el brazo extendido hacia el bolsillo del mandatario. Dirigentes locales reconocieron a la sospechosa y la Policía se trasladó a su domicilio en la localidad de Los Pizarro, a siete kilómetros de La Cocha.
La mujer fue detenida con el celular en su poder y trasladada a la comisaría de La Cocha, donde quedó aprehendida. El dispositivo fue devuelto al gobernador poco más de una hora después del hecho.
Según información publicada por el diario La Gaceta, la detenida no tendría antecedentes penales y podría estar vinculada políticamente como puntera en la ciudad de Juan Bautista Alberdi. La Fiscalía Penal de Instrucción, a cargo de Fabián Assad, convalidó la aprehensión y en las próximas horas se definirá la fecha de la audiencia de formulación de cargos. La causa está radicada en el Centro Judicial de Concepción.
En forma preventiva, el entorno del gobernador solicitó la baja inmediata de la línea telefónica, que luego fue reactivada tras la recuperación del aparato. La investigación sigue abierta y no se descarta que el hecho tenga algún trasfondo político.
En paralelo, crece el escándalo político en Alberdi
El episodio ocurre en un contexto de creciente tensión política en el sur de Tucumán, donde recientemente se difundieron audios comprometedores que involucran al exintendente de Juan Bautista Alberdi, Luis “Pato” Campos, y al empresario Roque “Chipi” Giménez. En las grabaciones, Giménez sugiere a Campos que se adjudique el control de la Policía, del narcotráfico y de la violencia en el municipio.
La difusión de estos audios, plagados de amenazas y referencias al narcotráfico, generó una fuerte reacción institucional. El Ministerio Público Fiscal solicitó la imputación y prisión preventiva de Giménez, quien fue aprehendido el 12 de junio en un operativo realizado en San Miguel de Tucumán. El juez a cargo aceptó todos los planteos de la Fiscalía, incluyendo la declaración de causa compleja y la prisión preventiva por seis meses.
La audiencia, celebrada el sábado 14, fue encabezada por la fiscal Mónica García de Targa y el auxiliar Bernardo Sassi, quienes argumentaron la existencia de riesgos procesales y la gravedad de los hechos investigados.
Tanto el robo al gobernador como la crisis política en Alberdi ponen bajo la lupa la situación de seguridad y gobernabilidad en el sur tucumano.