Tensión en CABA: Marcha de jubilados al Congreso con un megaoperativo de seguridad


Gendarmería y fuerzas federales controlan accesos a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, mientras el Gobierno despliega un refuerzo de seguridad

En el marco de la nueva marcha de jubilados al Congreso Nacional, convocada para este miércoles 19 de marzo a las 17:00 horas, el Gobierno de la Nación ha implementado un extenso operativo de seguridad que incluye el despliegue de fuerzas federales y controles en puntos clave como la autopista que une Córdoba, Rosario y Buenos Aires.

Este operativo se produce tras los incidentes ocurridos en la protesta anterior, lo que generó una escalada de tensión entre las autoridades y los manifestantes. A pesar de la magnitud de la convocatoria, que incluye sindicatos y agrupaciones sociales, el Gobierno ha decidido no aplicar el protocolo anti-piquetes, lo que marca un giro respecto a las medidas tomadas en protestas previas.

De acuerdo con fuentes oficiales, la seguridad estará reforzada en las inmediaciones del Congreso, con vallas para controlar los accesos y la circulación. El Gobierno también advirtió que las fuerzas de seguridad estarán presentes para actuar ante cualquier intento de desbordar el orden público, con la advertencia de que «la policía va a reprimir todo atentado contra la República».

Protesta y mensaje gubernamental

Un cartel del Gobierno, difundido en las estaciones de trenes, generó gran controversia. «La policía va a reprimir todo atentado contra la República», rezaba el mensaje, generando la expectativa de un control más severo frente a posibles incidentes. Sin embargo, desde Casa Rosada afirmaron que “protesta no es violencia” y trataron de aclarar que la represión solo se destinaría a quienes infrinjan el orden.

Además de los controles en las autopistas y accesos al centro de la ciudad, se anticipa que habrá cortes de calles y la represión de quienes intenten derribar las vallas de seguridad.

Paro y marcha sindical

La jornada de protestas podría extenderse más allá de la marcha de jubilados. ATE convocó un paro desde las 12:00, por lo que se espera que la Plaza del Congreso empiece a recibir manifestantes antes de las 17:00 horas. Con una amplia participación de organizaciones sociales, la marcha tiene como principal reclamo el aumento de los haberes previsionales para los jubilados.

El clima de tensión se intensifica a medida que se acerca la hora de la movilización, mientras el Gobierno intenta evitar que la protesta se convierta en un nuevo foco de violencia. A pesar de la advertencia oficial, el Ejecutivo asegura que su prioridad es evitar nuevos heridos y mantener el orden público durante todo el proceso de manifestación. TN