Profesionales del Comité para el Abordaje Integral del Suicidio (CAIS) destacaron el trabajo articulado entre instituciones de la provincia y la importancia de una comunicación responsable para salvar vidas. Subrayaron que hablar del tema con empatía y sin tabúes es clave para prevenir.
La prevención del suicidio sigue siendo uno de los desafíos más urgentes en materia de salud pública y acompañamiento social. En ese marco, integrantes de la Comisión para el Abordaje Integral del Suicidio (CAIS) visitaron Radio Tupambaé para dialogar sobre las acciones que se desarrollan en Misiones y los mensajes que buscan instalar en la sociedad: “hablar del tema salva vidas” y “te quiero vivo”.
Las licenciadas Rosanna Ibarrola, en Comunicación Social, y María Alejandra Redero, en Psicología, explicaron que el suicidio no es una enfermedad, sino una conducta multicausal que debe abordarse de manera integral, con participación de todos los sectores. “Hay factores biológicos, sociales, culturales y personales que pueden influir. No se trata de una única causa ni de un hecho aislado, sino de un sufrimiento que la persona siente que no puede afrontar”, señaló Redero.
Comunicación responsable y acompañamiento social
Uno de los ejes principales de trabajo de la Comisión es la comunicación, tanto en medios como en redes sociales. En ese sentido, Ibarrola destacó la necesidad de informar con responsabilidad, evitando detallar métodos o publicar imágenes. “Por cada muerte por suicidio hay al menos cuarenta personas afectadas: familiares, amigos, docentes, compañeros de club. Por eso es importante cuidar lo que se comunica y cómo se comunica”, remarcó.
Las profesionales enfatizaron que hablar del tema no induce a la acción, sino que abre puertas para pedir ayuda. “Si le preguntamos a alguien si está pensando en suicidarse y no lo está, no va a hacerlo por esa pregunta. Pero si lo está pensando, le estamos ofreciendo una oportunidad para expresarse”, explicaron.
Señales de alerta y la importancia de escuchar
Entre las señales que pueden advertir una crisis suicida, mencionaron cambios bruscos de conducta, aislamiento, pérdida de interés, alteraciones del sueño o la alimentación, expresiones de desesperanza o frases como “van a estar mejor sin mí”. “Es fundamental que la sociedad entienda que esos mensajes no son manipulación, sino pedidos de ayuda. Todos podemos ser esa primera escucha”, subrayó Redero.
El trabajo del CAIS se apoya en tres ejes: prevención, atención y posvención. Este último se refiere al acompañamiento que se brinda a las familias y comunidades luego de una pérdida, con el fin de evitar nuevas crisis.
Una red provincial que funciona en conjunto
Misiones es actualmente la única provincia del país que cuenta con un circuito integral y articulado para el abordaje del suicidio. En esta red participan los ministerios de Salud Pública, Educación, Seguridad, la Secretaría de Prevención de Adicciones, el IPS y distintas organizaciones sociales.
“La prevención es entre todos. Nadie puede hacerlo solo. Hemos recorrido más de 50 municipios y capacitado a más de 5.000 personas como referentes comunitarios”, destacó Ibarrola.
Las capacitaciones están orientadas a docentes, agentes de salud, líderes barriales y vecinos, con el objetivo de fortalecer esa “primera escucha” en los espacios cotidianos: la escuela, el club o la familia.
Líneas de ayuda y atención permanente
Entre los recursos disponibles, las profesionales resaltaron el rol del 911, que funciona las 24 horas para casos de crisis inminente. “No es una denuncia policial. Es una vía rápida para pedir ayuda. Los equipos de profesionales intervienen de inmediato y articulan con el sistema de salud”, explicaron.
Además, el IPS Misiones mantiene activa su línea de atención en crisis, el 3765-48-1000, disponible las 24 horas, los siete días de la semana, para toda la población, incluso quienes no son afiliados. También se puede contactar al CAIS al teléfono 376-495-0137 o al correo caismisiones@gmail.com.
“Hablar salva vidas”
La campaña provincial “Te quiero vivo” busca instalar un mensaje claro: prevenir el suicidio es posible. Implica estar atentos, acompañar con empatía y animarse a hablar del tema sin miedo. “La persona que sufre una crisis no quiere morir, quiere dejar de sufrir. Y ahí es donde la escucha y la contención pueden hacer la diferencia”, concluyó Redero.
En Misiones, septiembre fue declarado por ley Mes Provincial de la Prevención del Suicidio, con actividades en toda la provincia orientadas a sensibilizar, formar y acompañar. Porque como repiten desde la Comisión: “El silencio no protege, los vínculos sí. Hablar, escuchar y acompañar puede salvar una vida.”