San Benito Abad: «Un ideal de vida profunda en amor, entrega, servicio y oración»


El 11 de julio, en conmemoración del Día de San Benito Abad, la Parroquia «San Benito» de la Chacra 247 en Posadas celebró su Fiesta Patronal con una misa solemne a las 19 horas, presidida por el párroco R.P. Daniel Pesce. La festividad, que honra al fundador de la orden benedictina y Patrono de Europa, contó con una significativa participación de fieles y fue transmitida en vivo por Radio Tupa Mbae.

En su reflexión, el párroco resaltó la profunda devoción hacia San Benito Abad y su reconocido rol como protector contra el mal. Además, explicó cómo San Benito inició una vida ascética y fundó comunidades monásticas que perduran hasta hoy, dejando así un legado significativo. El llamado a la comunidad fue claro: enfrentar los desafíos contemporáneos con una iglesia comprometida con los más necesitados, concluyendo con una bendición que subrayó la centralidad del amor divino en la vida de todos.

 

Durante su homilía, el Padre Daniel Pesce destacó la importancia de la celebración y el novenario previo, que este año comenzó un día antes. «Después de haber celebrado nuestro novenario y la vigilia de ayer con las confesiones, hoy estamos celebrando ya la segunda misa. A la mañana hemos tenido este hermoso encuentro con todos los enfermos de la comunidad en la misa dedicada especialmente para ellos, con la unción, pidiendo esta gracia de Dios para todos ellos, para esa fortaleza necesaria para la vida», comentó.

El sacerdote subrayó la devoción popular hacia San Benito, afirmando que su protección y amor son esenciales en la lucha contra el mal. «San Benito es un santo muy querido por la gente, de mucha devoción popular, donde hay un arraigo tan, tan grande a él en este encuentro con su protección, con su amor en la lucha contra el mal. Hoy queremos pedirle a San Benito por cada uno de nosotros, por cada una de las intenciones que tenemos».

El Padre Pesce explicó la vida y legado de San Benito, destacando su renuncia a una vida acomodada para seguir a Dios y su fundación de comunidades monásticas que han perdurado a través de los siglos. «San Benito es un hombre de caminos, porque abrió el surco de su vida en medio del sufrimiento, en medio del dolor, pero también en medio de una búsqueda muy profunda de agradar a Dios. Y es así que comienza con una vida ascética y monástica dedicada a la oración. Posteriormente, fundará comunidades primero en Subiaco y luego en Montecassino, dejando así un legado que perdura a través de los siglos».

En referencia a los desafíos actuales, el sacerdote instó a la comunidad a orar y comprometerse con las realidades penosas de la sociedad. «Hoy el mal se presenta de muchas maneras. No pensemos en el mal solo como la representación del diablo. El mal se presenta de formas concretas en nuestra sociedad, en las desigualdades, en la pobreza extrema, en las vulnerabilidades».

El Padre Pesce recordó el lema de la novena y de la fiesta patronal: «Con San Benito, construyamos una Iglesia Pobre para los Pobres», desprendida del poder y del dinero; una iglesia pobre, entregada a Dios y a los pobres. Una iglesia abierta que abraza, contiene, acompaña y, sobre todo, levanta al que está caído».

Finalmente, el sacerdote hizo un llamado a formar una iglesia donde todos buscan intensamente el amor de Dios. «Pidamos hoy a San Benito, en esta Eucaristía, que nos ayude a formar esta iglesia donde todos somos parte, pero también donde todos buscamos con intensidad el amor de Dios, porque cuando encontramos esta presencia de Dios que nos ama, nos ayuda a todo, a darlo todo».

La celebración concluyó con una bendición especial del Padre Daniel Pesce, quien expresó: «Que San Benito nos acompañe, nos proteja, nos libre del mal y nos ayude a caminar como Iglesia».