El domingo, el personal diplomático de México abandonó Quito luego de que se rompieran las relaciones con Ecuador a raíz del asalto policial a su embajada el viernes pasado, en un intento de capturar al ex vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas. La cancillería mexicana confirmó la partida del personal y su regreso al país de origen.
La canciller mexicana, Alicia Bárcena, expresó en una publicación en redes sociales: “Nuestro personal diplomático deja todo en Ecuador y regresa a casa con la frente en alto tras el asalto a nuestra embajada”. El grupo está compuesto por 18 personas, quienes viajaron de vuelta en una aerolínea comercial debido a las tensiones, descartando el envío de un avión militar.
Acompañados por los embajadores de Alemania, Panamá, Cuba y Honduras, así como por el presidente de la cámara Ecuador-México, los funcionarios y sus familias fueron llevados al aeropuerto de Quito. La Embajada de México en Ecuador cerrará indefinidamente y suspenderá los servicios consulares para más de 1600 mexicanos y empresarios en el país.
No obstante, se aseguró que la comunidad mexicana y empresarial en Ecuador recibirán asistencia a través del Sistema de Registro para Personas Mexicanas en el Exterior (SIRME), así como en las embajadas de naciones cercanas como Chile, Colombia y Perú.
La decisión de retirar al personal diplomático se tomó luego de que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, declarara la ruptura de relaciones debido al ingreso de la policía a la embajada, un acto condenado por varios países latinoamericanos, Estados Unidos y la Unión Europea.
Tanto la Organización de Estados Americanos (OEA) como las Naciones Unidas rechazaron esta acción, considerándola una violación de la inviolabilidad de las instalaciones diplomáticas consagrada en la Convención de Viena de 1961.
Jorge Glas, quien estaba refugiado en la embajada mexicana desde diciembre, había recibido asilo político y enfrentaba cargos de corrupción en su país. Con información de TN