En medio de una creciente preocupación por los costos e insumos que impactan en la producción de yerba mate, los productores del sector mantienen firmemente su posición en cuanto al precio mínimo exigido por kilogramo de hoja verde, fijándolo en $505. Esta insistencia se evidencia ante la falta de acuerdo en las negociaciones, donde la determinación del nuevo valor para la materia prima sigue siendo motivo de debate.
La nueva sesión de precios, convocada por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), está programada para este jueves a partir de las 9 horas, buscando alcanzar un consenso que refleje las necesidades del sector productivo. Desde esta perspectiva, Ariel Steffen, uno de los productores del rubro, enfatizó la importancia de considerar los costos reales de producción al establecer el precio base.
«El monto de $505 es el mínimo indispensable, justo y necesario», declaró Steffen en una entrevista con El Territorio. Además, destacó que algunos productores ya están manejando valores cercanos a los $700 por kilo, lo cual refleja el aumento significativo en los precios de los insumos agrícolas, como los fertilizantes, que han experimentado incrementos exorbitantes en los últimos tiempos.
La reunión prevista para este jueves contará con la participación de representantes tanto del ámbito productivo como de la industria, así como del gobierno de Corrientes, en un esfuerzo por alcanzar un acuerdo consensuado. En una instancia anterior, la ausencia de los representantes industriales y provinciales llevó a posponer la discusión, resaltando la necesidad de un compromiso conjunto para abordar esta problemática.
Jonás Peterson, director por el sector productivo y presidente a cargo del INYM, señaló la importancia de llegar a un acuerdo en el precio de la hoja verde. En caso de no lograrse un consenso, la responsabilidad de determinar el precio recaerá en la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo de la Nación, liderada por Juan Pazo. Peterson expresó confianza en el compromiso de la secretaría para analizar exhaustivamente los datos proporcionados por el INYM y los sectores involucrados.
Hasta el momento, la cosecha de yerba mate presenta cierto retraso, con algunos productores aún a la espera del nuevo precio antes de vender su producción. Esta situación evidencia la importancia de alcanzar un acuerdo justo y equitativo que garantice la sostenibilidad económica de los productores y el sector en su conjunto.
La incertidumbre prevalece mientras los productores aguardan el desenlace de estas negociaciones, conscientes de la relevancia que el precio de la hoja verde tiene en su sustento económico y en la viabilidad futura de la industria yerbatera. Con información de El Territorio