El municipio refuerza controles, capacitaciones y registros para garantizar la seguridad de alimentos en comercios, caterings y ventas ambulantes.
Con el cierre del año y una agenda marcada por despedidas, reuniones y celebraciones, la actividad vinculada a la elaboración y comercialización de alimentos registra un fuerte incremento en la ciudad. En ese contexto, la Municipalidad de Posadas reforzó los controles y las instancias de capacitación para asegurar condiciones adecuadas de higiene y seguridad alimentaria.
Ariel Borsini, director de Seguridad e Higiene Alimentaria, explicó que la dependencia atraviesa días de intensa actividad debido al crecimiento de eventos y a la mayor demanda del carnet nacional de manipulador de alimentos, un requisito obligatorio para quienes trabajan en el rubro. “Es una exigencia básica, comparable al DNI o al carnet de conducir: sin ese aval no se puede desarrollar la actividad”, señaló en declaraciones a FM Santa María de las Misiones.
La Dirección organiza su trabajo en dos grandes áreas. Por un lado, la fiscalización, que alcanza a comercios, industrias, PyMEs, eventos, emprendedores y vendedores en la vía pública, con tareas de autorización, habilitación y verificación del funcionamiento bajo criterios de buenas prácticas de manufactura. Por otro, el área de capacitación, encargada de dictar cursos de manipulación de alimentos y emitir el carnet correspondiente, además de ofrecer formaciones específicas según el rubro.
En los últimos meses, destacó Borsini, aumentó de manera sostenida la cantidad de personas que se inscriben para realizar los cursos. Para atender esa demanda, el municipio sostiene convenios con instituciones educativas que también están habilitadas para el dictado, entre ellas la Facultad de Ciencias Exactas, Químicas y Naturales de la UNaM, el ISET, el colegio Martín de Moussy, el IGA y el Colegio de Nutricionistas.
Uno de los puntos centrales de la temporada es la contratación de servicios de catering, especialmente para fiestas de egresados y celebraciones de fin de año. Al respecto, el funcionario remarcó la importancia de verificar que las empresas estén habilitadas conforme a la ordenanza vigente y recordó que existe un registro municipal específico. “Una de las instancias finales del circuito de habilitación es la verificación del correcto funcionamiento”, explicó.
El sistema de habilitación contempla distintas categorías —A, B y C— según la capacidad de elaboración, la posibilidad de traslado de equipamiento o la prestación del servicio en el lugar donde se elabora el alimento, como clubes o salones de eventos.
En materia de controles sanitarios, la Dirección trabaja de manera articulada con Bromatología. “Cuando hablamos de comida, hablamos de salud”, subrayó Borsini, al señalar que se realizan intervenciones periódicas y se aplican sanciones cuando corresponde.
También creció la presencia de carritos y ventas ambulantes. Según detalló, todos deben inscribirse en un registro municipal, iniciar el trámite de autorización y recibir inspecciones y recomendaciones para un funcionamiento adecuado, en coordinación con otras áreas del municipio.
Respecto de quienes ofrecen servicios sin habilitación, incluso a través de redes sociales, el director indicó que el municipio promueve la regularización: “La invitación es a acercarse, asesorarse y cumplir con la normativa”. En paralelo, recomendó a los vecinos no priorizar únicamente el precio al contratar, sino también las condiciones sanitarias.
De cara a 2026, el objetivo es profundizar auditorías, controles y fiscalizaciones para seguir mejorando la seguridad alimentaria en la ciudad. Como balance del año, Borsini calificó el trabajo como “bastante positivo” y destacó el respaldo institucional para la tarea cotidiana.
Quienes deseen consultar el listado de empresas de catering habilitadas pueden hacerlo en el segundo piso del edificio central municipal, en la Dirección de Seguridad e Higiene Alimentaria, o a través de la página web y redes sociales de la Municipalidad, dentro del ámbito de la Dirección General de Control Alimentario y Fiscalización Urbana. Primera Edición

