El ministro de Educación de Misiones, Ramiro Aranda, anunció la implementación de un nuevo enfoque para el programa nacional “Una hora más”, que se aplicará en las escuelas primarias de la provincia a partir del próximo ciclo lectivo. En lugar de extender la jornada escolar diaria, la provincia propuso la realización de tutorías de lengua y matemática a contraturno, dirigidas a estudiantes que necesiten apoyo adicional.
“Hicimos una propuesta para adaptar este programa a nuestra realidad. En vez de sumar una hora diaria, decidimos que es mejor ofrecer tutorías a contraturno, dos veces por semana, para quienes realmente lo necesiten”, explicó el ministro Aranda. Esta decisión se tomó luego de un análisis profundo sobre el impacto que tendría la extensión horaria en la organización familiar y la eficacia pedagógica.
El nuevo formato busca evitar cambios bruscos en las rutinas diarias de las familias. “Si hubiéramos optado por sumar una hora más todos los días, muchas familias se habrían visto afectadas. Imagina tener que cambiar el horario de búsqueda de los niños, de 11:30 a 14:30. No queríamos alterar la vida cotidiana de nadie”, señaló Aranda.
El programa se pondrá a prueba en algunas escuelas seleccionadas antes de su implementación general. “Vamos a empezar con una experiencia piloto para ver cómo se comporta la dinámica financiera y organizativa, y si todo funciona bien, el año próximo extenderemos el programa a más escuelas”, explicó el ministro.
El Plan de Alfabetización y la importancia de las tutorías
Durante la misma entrevista, Aranda destacó el avance del Plan de Alfabetización provincial, el cual busca mejorar los niveles de lectoescritura y matemáticas en las escuelas primarias. “Ya estamos trabajando desde el nivel inicial hasta el primer ciclo de primaria, porque es en la primera infancia donde el acompañamiento en la lectura es fundamental”, afirmó. Las tutorías a contraturno serán una extensión de este plan, enfocadas en los ciclos que más apoyo necesiten según los diagnósticos escolares.
El ministro también subrayó la importancia de reconocer los desafíos educativos para abordarlos con eficacia. “No sirve decir que todo está bien cuando no lo está. Necesitamos datos claros para actuar y mejorar. Estoy convencido de que, al finalizar mi gestión, podremos mostrar avances en la lectoescritura y el cálculo matemático, que son las bases del desarrollo en todas las áreas”, dijo.
Un enfoque a largo plazo para el desarrollo educativo
Aranda enfatizó que esta estrategia no solo busca resultados inmediatos, sino también un impacto a largo plazo en el desarrollo de los estudiantes. “Los niños que están hoy en primero a tercer grado, cuando terminen nuestra gestión, estarán ingresando al secundario. Si logramos que lean bien y mejoren su desempeño en ciencias, será un gran logro”, expresó.
El funcionario también destacó el compromiso de los docentes misioneros y su participación en competencias internacionales, lo cual, según él, refleja el alto nivel educativo de la provincia. “Estoy orgulloso de nuestros profesionales, que demuestran su capacidad en concursos de filosofía, ingeniería o robótica. Estoy seguro de que, con este nuevo enfoque, seguiremos mejorando juntos”, concluyó. MOL