Los hermanos Germán (44) y Sebastián (47) Kiczka, ambos bajo acusación de tenencia y distribución de material de abuso sexual infantil (MASI), enfrentan la justicia en la localidad de Apóstoles. Germán, quien fue capturado primero, se negó a declarar ante el juez de Instrucción Cuatro, Miguel Ángel Faria, mientras que Sebastián, detenido posteriormente, será presentado mañana sábado para su indagatoria, con la expectativa de que también opte por guardar silencio.
Ambos hermanos, sobre quienes pesaba una orden de captura internacional emitida por Interpol, fueron detenidos en circunstancias diferentes pero similares en su desenlace. Germán fue aprehendido en la madrugada del jueves tras ser identificado en Loreto, Corrientes, por una vecina que lo reconoció al verlo en las noticias. Por su parte, Sebastián fue capturado en San Juan de la Sierra, tras intentar negociar su entrega en condiciones que fueron rechazadas por el gobierno misionero.
Los Kiczka, quienes se encuentran en la misma comisaría pero en celdas separadas, han designado al mismo abogado defensor. Este viernes, Germán fue trasladado al juzgado en medio de un operativo de seguridad significativo, donde decidió abstenerse de declarar. Se espera que Sebastián siga el mismo curso durante su audiencia de mañana a las 10 horas.
La gravedad de las acusaciones contra los hermanos, que podrían llevar a una pena de hasta seis años de prisión o más si se confirma la implicación de menores de 13 años, ha generado una gran expectativa en la comunidad local y nacional. MOL