En un clima de profunda reflexión y solemnidad, los 113 cardenales reunidos en el Vaticano han celebrado su tercera congregación general, como parte del proceso previo al cónclave que elegirá al próximo Papa. Esta jornada, que tuvo lugar en el Nuevo Aula Sinodal, marcó un paso crucial en la organización de la transición en la Santa Sede, que sigue la muerte del Papa Francisco.
Organización y meditaciones pre-Cónclave
El director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni, informó que, además de las intervenciones y el juramento de los cardenales no presentes en congregaciones anteriores, se definieron detalles significativos sobre las actividades espirituales que precederán la elección papal. El cardenal Víctor Manuel Fernández presidirá la misa del sexto día de los Novemdiales, sustituyendo al cardenal Kevin Farrell.
Los cardenales también confirmaron a los predicadores de las meditaciones que precederán al cónclave. El padre Donato Ogliari OSB, abad de la Basílica de San Pablo Extramuros, será el encargado de la primera meditación el lunes, mientras que el cardenal Raniero Cantalamessa, predicador emérito de la Casa Pontificia, dará la segunda meditación, al inicio del cónclave. La fecha exacta del cónclave, sin embargo, aún no ha sido determinada.
El papel de las congregaciones generales en el período de vacancia
Durante este período de vacancia en la Sede Apostólica, las congregaciones generales de cardenales juegan un papel fundamental en la preparación para la elección del nuevo Papa. Estas reuniones, convocadas por el decano del colegio cardenalicio, reúnen a todos los cardenales, electores y no electores, para discutir los asuntos más importantes de la Iglesia y gestionar los asuntos cotidianos de la Santa Sede.
En la sesión de hoy, los cardenales debatieron sobre la Iglesia y el mundo, abordando temas de relevancia global mientras permanecen en un proceso de discernimiento y diálogo. También se revisaron los párrafos 1 a 23 de la constitución apostólica Universi Dominici Gregis, que regula las normas durante el período de vacancia.
El futuro de la Iglesia: una tarea colectiva
El proceso de estas congregaciones genera una oportunidad para los cardenales, provenientes de diversos rincones del mundo, de compartir sus perspectivas y fortalecer la unión en la toma de decisiones tan trascendentales. Este período de reflexión colectiva es clave para la elección del próximo Papa, que no se ve precedido por ninguna «campaña electoral».
Según Bruni, la próxima congregación general se celebrará el viernes por la mañana. Además, informó que más de 61.000 personas han rendido homenaje al Papa Francisco en la Basílica de San Pedro, y que el cierre de la basílica está previsto para la medianoche del jueves, salvo que haya grandes multitudes aún esperando para ingresar.
El último adiós al Papa Francisco
El funeral del Papa Francisco, que tendrá lugar en privado el sábado 26 de abril, será seguido por una vigilia de oración con un rosario frente a la Basílica de Santa María la Mayor. A partir del domingo 27, los fieles podrán comenzar a visitar la tumba del Papa Francisco en la Basílica de Santa María la Mayor.
¿Qué son las congregaciones generales?
Las congregaciones generales, que se convocan después de la muerte de un Papa, desempeñan un papel crucial en la transición y en la preparación para la elección de un nuevo pontífice. Estos encuentros permiten a los cardenales, que representan a la Iglesia global, discutir temas urgentes como la fecha y los detalles del funeral del Papa, así como los aspectos logísticos de la Santa Sede durante el período de vacancia.
Además, durante estas reuniones se decide la fecha del cónclave, siempre que todos los cardenales electores hayan llegado a Roma. Las congregaciones también abordan otros temas importantes, como la anulación del anillo del pescador y el alojamiento de los cardenales en la residencia de Santa Marta.
Este proceso de congregación no solo es un acto administrativo, sino también un espacio para el diálogo y el encuentro entre cardenales de distintas culturas y continentes. En este tiempo de maduración y reflexión, los cardenales se preparan para un acto trascendental: la elección del sucesor de San Pedro. AICA