Llegó el día menos esperado para Crucero


A partir de las 16, Crucero irá por un triunfo que le dé un mínimo de aire en el Federal A. Si no derrota a Boca Unidos, el Colectivero descenderá al torneo Regional a tres fechas del final.

Crucero afrontará una de las jornadas más complicadas de su historia. A partir de las 16 y en el estadio Andrés Guacurarí de Santa Inés, el Colectivero será local ante Boca Unidos y deberá ganar o ganar para mantener sus mínimas posibilidades de seguir en el torneo Federal A.

El conjunto que dirige Adrián Álvarez realizó una pésima campaña, en la que apenas ganó dos encuentros de los 21 que disputó en el certamen. Eso lo condenó al último lugar en la fase de grupos, algo que no pudo remontar en la Reválida.

La 6° fecha puede marcar el final de Crucero en el torneo Federal A, al que volvió en 2017, luego de un par de años entre la B Nacional y su paso por Primera División en 2015.

Hace ya varias fechas que Crucero vive una agonía. No gana y sus rivales sí. Sigue hundido en el fondo de los promedios y hoy podrían darle el golpe de nocaut.

Si el conjunto de Santa Inés no gana descenderá. Crucero está en la muy compleja situación de que debe sumar de a tres y, además, esperar a que Gimnasia (CdU), Ben Hur y Defensores de Villa Ramallo pierdan sus respectivos juegos para tener una semana más de gracia en el Federal A.

Es que la situación es tan compleja que, aún ganando los cuatro partidos que le quedan, Crucero podría descender igual si es que Gimnasia (CdU), Ben Hur o Defensores de Villa Ramallo suman este fin de semana.

Más allá de que la combinación de resultados para que el Colectivero mantenga la categoría o llegue a un desempate por seguir en el Federal A es casi remota, lo que pone en jaque a la esperanza del equipo es el pobre rendimiento que mostró el equipo a lo largo del certamen.

Crucero lleva 16 encuentros sin ganar. Acumula 133 días sin poder festejar y esos números marcaron que hoy, a cuatro fechas para el final de la Reválida, el Colectivero pueda vivir una de las jornadas más tristes de su historia.

Sería el regreso al escalafón más bajo del fútbol en esta parte del país. Volvería a la Liga Posadeña, la que ganó en 2004 y que le dio el puntapié inicial a un recorrido que lo llevó a medirse con los grandes del fútbol argentino en la Primera División.

Pero la esperanza es lo último que se pierde y por eso Crucero buscará un triunfo. De ganar deberá, luego, mirar a lo que suceda con sus rivales directos en la pelea por mantenerse en la tercera categoría del fútbol argentino.