El papa León XIV afirmó que la libertad religiosa es “la piedra angular de la sociedad” al recibir este viernes en audiencia a los miembros de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), a quienes elogió por su compromiso en la defensa de este derecho fundamental.
El encuentro se realizó en vísperas de la publicación del Informe sobre la Libertad Religiosa en el Mundo, que será presentado el próximo 21 de octubre. En su discurso, el Pontífice expresó que la visita de la delegación se produce “en un momento de crecientes hostilidades y violencia contra aquellos que tienen convicciones diferentes, incluidos los cristianos”.
“La misión de ACN contrasta con esa violencia, porque proclama que la Iglesia nunca puede abandonar a nuestros hermanos y hermanas perseguidos”, destacó.
“Un derecho esencial, no opcional”
León XIV subrayó que el derecho a la libertad religiosa “no es opcional, sino esencial”, ya que responde al profundo anhelo del ser humano “de verdad, de significado y de comunión con los demás y con Dios”.
“Enraizada en la dignidad de la persona humana, creada a imagen de Dios y dotada de razón y libre albedrío, la libertad religiosa permite a los individuos y comunidades buscar la verdad, vivirla libremente y dar testimonio de ella abiertamente”, afirmó.
El Papa advirtió que cuando este derecho es negado, “se produce una lenta desintegración de los vínculos éticos y espirituales dentro de las comunidades”. En ese sentido, citó a Francisco al recordar que “no puede haber paz sin libertad de religión, libertad de pensamiento, libertad de expresión y respeto por las opiniones de los demás”.
Una condición para la reconciliación
“La libertad religiosa no es simplemente un derecho legal ni un privilegio otorgado por los gobiernos”, insistió León XIV, sino “una condición fundamental que posibilita la auténtica reconciliación”.
Asimismo, recordó que la Iglesia Católica defiende este derecho para todas las personas, evocando la enseñanza del Concilio Vaticano II, que lo reconoció como “un derecho que debe ser protegido por todas las naciones”.
Reconocimiento a Ayuda a la Iglesia Necesitada
El Papa destacó el papel de Ayuda a la Iglesia Necesitada, nacida en 1947 “como respuesta al sufrimiento causado por la guerra”, con la misión de promover el perdón, la reconciliación y de dar voz a la Iglesia donde sufre o se encuentra amenazada.
Elogió el Informe sobre la Libertad Religiosa en el Mundo, que ACN publica cada dos años, como “una herramienta valiosa para crear conciencia y revelar el sufrimiento oculto de muchos”. Además, agradeció a la organización por su constante apoyo financiero a instituciones eclesiales en distintas regiones, en especial en la República Centroafricana, Burkina Faso y Mozambique.
“Dondequiera que Ayuda a la Iglesia Necesitada reconstruye una capilla, apoya a una religiosa o proporciona una estación de radio o un vehículo, se fortalece la vida de la Iglesia y el tejido espiritual y moral de la sociedad”, afirmó el Pontífice.
Finalmente, León XIV destacó que el acompañamiento a las comunidades cristianas locales “permite a las minorías ser artífices de la paz en sus países de origen”, convirtiéndose en “un signo vivo de armonía social y fraternidad, mostrando a sus vecinos que un mundo diferente es posible”.