En una jornada cargada de simbolismo, el papa León XIV presidió el domingo una misa en las Grutas Vaticanas, específicamente en el altar ubicado junto a la tumba del apóstol San Pedro, antes de encabezar la tradicional oración del Regina Coeli desde el balcón central de la basílica de San Pedro.
Según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el Santo Padre concelebró la Eucaristía junto al prior general de la Orden de San Agustín, padre Alejandro Moral Antón OSA.
Finalizada la celebración, León XIV se detuvo en oración ante las tumbas de dos de sus predecesores, los papas Pío XII y Benedicto XVI, cuyas sepulturas se encuentran también en las Grutas Vaticanas.
Además, el pontífice dedicó un momento de oración frente a la Nicchia dei Palli, donde se custodian los palios que serán entregados a los nuevos arzobispos metropolitanos, como signo de comunión con la Sede Apostólica.