En la región costera del Alto Uruguay, los productores de mamón están enfrentando una crisis sin precedentes. La reciente falta de ventas y el cierre de una importante fábrica de frutas abrillantadas en Buenos Aires han llevado a muchos a eliminar sus plantaciones. La situación es desesperante, y los productores esperan con incertidumbre el futuro de sus cosechas. La Cooperativa Alto Uruguay, una entidad clave en la producción y comercialización de mamón, está considerando la posibilidad de acopiar la producción y definir nuevos términos de pago.
Para profundizar en esta problemática, Radio Tupa Mbae conversó con Freddy Frank, socio y expresidente de la Cooperativa Alto Uruguay Ltda (CAUL). Frank, quien lideró la cooperativa durante casi dos décadas, compartió sus preocupaciones sobre el estado actual del sector. Destacó que, mientras en el pasado la cooperativa manejaba grandes volúmenes de producción (3 millones de kilos), ahora solo acopia una fracción (10%). Además, criticó la intervención política y la falta de acción de la cooperativa actual, que no ha logrado buscar nuevos mercados ni ofrecer incentivos adecuados. La crisis afecta a casi 6.000 socios, muchos de los cuales consideran abandonar la producción. Frank advirtió que, sin soluciones efectivas, tanto la cooperativa como la producción de mamón en la región están en grave peligro.
Productores de mamón destruyen plantaciones por “falta de mercado”
“Estamos enfrentando una crisis similar a la que viví en 2006, cuando la cooperativa comenzó a recuperarse tras la crisis de los noventa”, explicó Frank a La Creíble FM 105.9. “La falta de mercados ha llevado a muchos a destruir sus plantaciones. En mi gestión, a pesar de las dificultades, siempre buscamos mercados para el mamón, viajando por todo el país para encontrar compradores.”
Frank lamentó que, tras su salida de la presidencia en diciembre pasado, la cooperativa parece estar cayendo en la misma trampa que otras grandes cooperativas de la provincia. “La política ha intervenido de manera destructiva”, afirmó Frank. “Vemos que el actual intendente de Colonia Aurora, quien ganó la asamblea, ha prometido comprar 200 mil kilos de mamón sin definir un precio, lo cual agrava aún más la situación.”
El expresidente de la CAUL destacó que, en el pasado, la cooperativa llegó a acopiar hasta 3 millones de kilos de mamón, pero ahora solo se están recolectando 200 mil kilos. “La falta de mercado y la incapacidad de buscar nuevas oportunidades están llevando a muchos productores a destruir sus cosechas. El esfuerzo de años se está perdiendo”, agregó Frank, visiblemente afectado.
Frank también criticó la falta de acción por parte de la cooperativa actual, señalando que el problema radica en no buscar activamente mercados y en la gestión política que ha afectado la operatividad. “El productor necesita incentivos y asistencia técnica, no promesas vacías. La cooperativa, que alguna vez fue un pilar para la región, está en riesgo de desaparecer”, advirtió.
La situación es preocupante para los casi 6.000 socios de la cooperativa, muchos de los cuales están considerando abandonar la producción de mamón debido a la falta de rentabilidad. Frank concluyó con una reflexión sobre el futuro de la cooperativa y el impacto de las decisiones políticas en el sector agroindustrial de la región.
Este llamado de atención sobre la crisis en la Cooperativa Alto Uruguay pone de manifiesto la necesidad urgente de soluciones efectivas para salvaguardar la producción regional y apoyar a los productores que están enfrentando grandes dificultades.