En el marco de las festividades de San Antonio de Padua, Patrono de Oberá, se ha confirmado que la Escuela 173, ubicada en Fontana, se transformará en un nuevo Centro de Rehabilitación y Acompañamiento para personas que enfrentan adicciones. Este proyecto, denominado “Fazenda de Esperanza” y liderado por el obispo de Oberá, Damián Santiago Bitar, contará con el apoyo del Consejo General de Educación, que ha suscrito un contrato de comodato para el uso de las instalaciones.
Un proyecto de esperanza
El obispo Damián Santiago Bitar, impulsor de la iniciativa, ha destacado que “Fazenda de Esperanza” está diseñado para brindar acompañamiento y asistencia integral a aquellas personas que luchan contra las adicciones. El centro incluirá casas de apoyo, trabajo y convivencia, creando un entorno propicio para la rehabilitación y reintegración social.
Durante la homilía celebrada en la Catedral de Oberá, los representantes de la Diócesis expresaron su agradecimiento al municipio de Oberá, al Gobierno de Misiones y al Ministerio de Educación por su colaboración. “Esta decisión refleja el compromiso conjunto entre las autoridades eclesiásticas y gubernamentales para abordar de manera integral el desafío de asistir a personas con adicciones”, afirmaron.
Celebraciones y reflexiones
La mañana del jueves también fue marcada por la celebración de una misa especial en honor a San Antonio de Padua, así como el 15º aniversario de la creación de la Diócesis de Oberá. La misa fue presidida por el arzobispo de Corrientes, Andrés Stanovnik, quien en su homilía invitó a los fieles a reflexionar sobre la importancia de la fe, la coherencia y la consideración hacia los demás. “El verdadero poder no reside en la soberbia ni en el autoritarismo, sino en la escucha y en pensar en los demás”, señaló Stanovnik, haciendo un llamado a la unidad y la integración de los jóvenes en la sociedad.
Autoridades y comunidad
El evento contó con la presencia del gobernador Hugo Passalacqua, el obispo de Oberá Damián Santiago Bitar, el obispo de Posadas Juan Rubén Martínez, y el obispo de Puerto Iguazú Nicolás Baisi. También asistieron el intendente de Oberá Pablo Hassan, la subsecretaria de Culto de Misiones Rosanna Barrios, otras autoridades locales, representantes de las fuerzas de seguridad, referentes de las colectividades de Oberá, miembros del clero y la comunidad católica en general.
La transformación de la Escuela 173 en un centro de rehabilitación representa un paso significativo en la lucha contra las adicciones en Oberá, mostrando un compromiso sólido entre las autoridades y la comunidad para brindar apoyo y esperanza a quienes más lo necesitan. Con información de El Territorio