La recesión en Argentina continúa profundizándose, con una nueva contracción en el segundo trimestre de 2024. Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), el Producto Bruto Interno (PBI) cayó un 1,7% entre abril y junio, tanto en términos interanuales como en comparación con el trimestre anterior. Esto llevó a una contracción acumulada del 3,4% en los primeros seis meses del año, en relación con el mismo período de 2023.
Pese a que la caída en la actividad económica se desaceleró respecto al primer trimestre, el impacto de la recesión sigue afectando a varios sectores clave de la economía. La oferta global, que combina el PBI con las importaciones, anotó una baja anual del 6,4%, siendo las importaciones de bienes y servicios las más afectadas, con un desplome del 22,5%.
Sectores en declive y recuperación
Los sectores más perjudicados en este período fueron la industria manufacturera, que registró una caída del 17,4%, el comercio con una baja del 15,7%, y la construcción, que sufrió un desplome del 22,2%. El sector financiero también experimentó un retroceso considerable, acentuando la contracción en la actividad económica general.
Por otro lado, el sector agropecuario presentó un crecimiento sorprendente del 81,2%, impulsado por la recuperación tras la sequía que afectó gravemente al país en 2023. Este incremento ayudó a amortiguar la caída global del PBI. Asimismo, la minería y los hidrocarburos mostraron un crecimiento del 6,6%, lo que también contribuyó a mitigar el impacto negativo de la recesión.
Inversión y consumo en retroceso
Desde el lado de la demanda agregada, la inversión fue el componente que más sufrió, con una contracción del 29,4% en comparación con el mismo trimestre del año anterior. El consumo privado también cayó un 9,8%, mientras que el gasto público se redujo en un 6%. En contraste, las exportaciones aumentaron un 31,4%, ayudando a compensar el enfriamiento del mercado interno.
Con tres trimestres consecutivos en recesión, las proyecciones apuntan a que la economía podría haber tocado fondo en el segundo trimestre. Sin embargo, los desafíos para la recuperación económica persisten, especialmente en los sectores más afectados por la caída de la inversión y el consumo.