Este miércoles, la Cámara de Diputados de la Nación se reunirá en una sesión especial para debatir el veto presidencial de Javier Milei a la reforma de los haberes jubilatorios. La sesión, programada para las 10 de la mañana, definirá si el Congreso insiste en ratificar la ley previamente aprobada o si se mantiene la decisión del Ejecutivo.
El oficialismo ha intensificado sus esfuerzos en los últimos días para conseguir los apoyos necesarios y evitar una derrota en el recinto, mientras que la oposición busca revertir la medida de Milei. La convocatoria fue respaldada por sectores de la UCR, Encuentro Federal y la Coalición Cívica, contando además con el apoyo de Unión por la Patria y el Frente de Izquierda.
El objetivo del veto: Equilibrio fiscal
El gobierno libertario justifica el veto bajo el argumento de mantener el «equilibrio fiscal». Para sostener la decisión presidencial, el oficialismo necesita 86 votos. Hasta el momento, el bloque oficialista, que cuenta con 37 diputados, suma el apoyo de los 37 representantes del PRO y 3 votos adicionales del MID, liderado por Oscar Zago, lo que totaliza 77 voluntades. Aún falta asegurar más respaldos para llegar a los 86 requeridos.
El quórum, factor clave
Más allá del conteo de votos, un factor crucial será lograr el quórum necesario para abrir la sesión, lo que requiere la presencia de 129 legisladores. En tanto, la oposición necesita reunir 171 votos para revertir el veto de Milei.
De los firmantes de la convocatoria, solo 17 miembros del bloque radical se han comprometido a participar, lo que representa la mitad del bloque. Asimismo, Encuentro Federal y el bloque de Innovación Federal, con 16 y 8 legisladores respectivamente, tendrán un papel decisivo en el resultado de la votación.
La sesión de este miércoles podría marcar un punto de inflexión en la política jubilatoria y fiscal del país, con expectativas de una tensa jornada en el recinto.