Situado en el corazón de Posadas, en la calle Estado de Israel 2638, el Hogar de Ancianos Agustín Liarte brinda un rayo de esperanza a 17 mujeres, cuyas edades oscilan entre los 70 y los 90 años. En una entrevista telefónica con Radio Tupa Mbae, Claudia Codaro, encargada del hogar, ofreció una visión íntima de su día a día y los desafíos que enfrentan, destacando la importancia del apoyo de la comunidad para seguir brindando cuidado y atención a quienes más lo necesitan.
El hogar de ancianos Agustín Liarte funciona como tal hace 93 años y su antiguo edificio sobrevive en el tradicional barrio El Palomar de Posadas hace más de 100. Actualmente alberga y contiene sólo a mujeres, cuyo personal se esfuerza a diario para seguir con la atención en estos tiempos cada vez más complicados.
«La realidad es difícil desde hace mucho tiempo, ahora más que nada por la cuestión económica, pero siempre con mucho amor y vocación se sale, se puede», expresó la encargada del hogar, reflejando la determinación y el compromiso del equipo de colaboradores.
En un edificio que data de 1900, las paredes de adobe y los azulejos de vidrio cuentan la historia centenaria del hogar. A pesar de su grandeza, las limitaciones edilicias dificultan la posibilidad de recibir más residentes. «La demanda es altísima. Todo el tiempo estamos recibiendo pedidos de cama», señaló Codaro, destacando la necesidad de ampliar las instalaciones para dar cabida a más personas necesitadas.
Las residentes del hogar, aunque en diferentes estados de salud, encuentran en este lugar un refugio seguro y amoroso. «Algunas tienen un inicio de demencia senil, de Alzheimer, pero hay otras que están muy bien mentalmente, muy lúcidas», comentó Codaro, subrayando la diversidad y la atención personalizada que reciben cada una de ellas.
En medio de los desafíos, el hogar ha iniciado una campaña de recaudación de fondos y donaciones. «Estamos abiertos a recibir todo tipo de ayuda, desde compartir un mate hasta donaciones materiales», destacó Claudia Codaro, llamando a la solidaridad de la comunidad para poder mejorar las condiciones del hogar y brindar una mejor calidad de vida a sus residentes.
La respuesta de la comunidad ha sido alentadora, con muchos acercándose para conocer la historia y contribuir con el hogar. «Queremos quitar el estigma de que los geriátricos son depósitos. Aquí, las abuelas encuentran una nueva oportunidad de vida», enfatizó Codaro, resaltando el impacto positivo que tiene el hogar en la vida de las personas mayores.
El Hogar de Ancianos Agustín Liarte representa más que un refugio; es un símbolo de amor, dedicación y comunidad en Posadas. Con el apoyo de todos, se espera poder superar los desafíos y continuar brindando un espacio de cuidado y cariño para aquellas personas que más lo necesitan. Aquellos interesados en colaborar, pueden comunicarse a los siguientes teléfonos: 4-424581 / 3764-848501.
Portada: Matías Peralta (El Territorio)