En los últimos días, el hallazgo de una gran cantidad de peces muertos en la zona de los clubes náuticos de la costanera de Posadas generó preocupación entre los residentes y puso en alerta a las autoridades ambientales. Sin embargo, los resultados preliminares de las investigaciones han descartado la posibilidad de contaminación química como causa de la mortandad.
Tras realizar análisis exhaustivos del agua en la zona afectada, el informe técnico reveló que la falta de oxígeno en el agua fue la principal razón de la muerte de los peces. Según Alejandro Valenzuela, responsable del área de Ambiente de la Municipalidad de Posadas, “la concentración de oxígeno en el agua era prácticamente nula en el área donde se encontraron los peces muertos, lo que hizo imposible que sobrevivieran”.
El fenómeno, que se agrava por las condiciones particulares de esa zona costera, donde el desplazamiento del agua es muy lento, contribuye a la estancación y dificulta la correcta oxigenación. Además, otros factores como la cantidad de basura suspendida en el agua y las condiciones meteorológicas, como la dirección del viento, también influyen en la reducción de oxígeno disponible.
El análisis de laboratorio también descartó la presencia de sustancias químicas, líquidos cloacales, o contaminantes industriales en el agua. Valenzuela afirmó que “no se encontraron indicios de contaminación química ni evidencias de un derrame cloacal significativo en la zona”, lo cual asegura que no existe un riesgo inmediato para la salud de las personas que utilizan el río para actividades recreativas.
A pesar de ser un evento aislado, Valenzuela subrayó la importancia de la colaboración ciudadana en el cuidado del medioambiente. Destacó que “el comportamiento de las personas en cuanto a la higiene urbana tiene mucho que ver con la salud de nuestros cuerpos de agua”. En la visita al lugar hoy, no se encontraron más peces muertos.
El funcionario también señaló que el municipio está trabajando en un monitoreo constante de las cuencas de la ciudad para prevenir futuros incidentes, y resaltó la iniciativa de los vecinos para limpiar el arroyo Vicario próximamente.
Aunque otros factores contaminantes fueron descartados, el incidente subraya la necesidad de una gestión más eficiente y colaborativa del entorno natural. Valenzuela concluyó: “Como sociedad, debemos extremar las medidas para evitar que los residuos lleguen a nuestros cuerpos de agua”. El Territorio