El ministro del Interior, Guillermo Francos, reveló este domingo que el Gobierno está considerando fijar el nuevo piso para el Impuesto a las Ganancias entre los $1.500.000 y $2.000.000. Esta medida, de gran importancia fiscal para las provincias, está siendo analizada por el equipo del ministro de Economía en línea con la meta de mantener un «déficit cero», según indicó el funcionario.
«El nuevo umbral estará dentro de esos rangos», afirmó Francos durante una entrevista en Radio Rivadavia. Además, aseguró que las escalas serán progresivas y que esta propuesta ha sido bien recibida por los gobernadores de Juntos por el Cambio, quienes se reunieron recientemente con funcionarios del Gobierno.
En cuanto a la retroactividad de la medida, Francos aclaró que no aplicará para el primer trimestre ni el último trimestre del año pasado. «La ley no será retroactiva a esos períodos. Esto será corregido y aquellos ingresos no estarán sujetos a Ganancias», anunció el ministro.
A pesar del respaldo de los gobernadores, la incertidumbre persiste en el Congreso debido a la falta de precisión en varios artículos del proyecto de ley «ómnibus», que hasta el momento continúa como un borrador.
En este sentido, Francos expresó: «Nuestra intención es finalizar esta semana las conversaciones para afinar cada uno de los puntos de la ley. Siempre hay algunos problemas de redacción pendientes». Sin embargo, confía en que la ley sea aprobada para fines de abril, dando margen al Senado para su análisis antes de la eventual firma del Pacto de Mayo propuesto por el Presidente.
El Gobierno considera que ha alcanzado varios puntos de consenso y está optimista sobre una votación exitosa en la Cámara baja, previa a los dictámenes en el plenario de tres comisiones, siempre y cuando se presente el texto definitivo.
La propuesta del nuevo umbral para el Impuesto a las Ganancias se percibe como una medida que impulsará la actividad económica y productiva en diversas provincias, atrayendo inversiones tanto nacionales como extranjeras. Francos destacó la importancia de este gesto político como una muestra de unidad en busca del desarrollo económico del país.
Por otro lado, el ministro abordó la tensa relación con el sindicato de Camioneros, liderado por Pablo Moyano, señalando que el Gobierno tomará las medidas legalmente permitidas ante cualquier acción del gremio. Además, mencionó que la conciliación obligatoria siempre está disponible como herramienta en situaciones de crisis gremial. (Infobae)