En el marco de la conmemoración del centenario de la “Conferencia de todas las religiones”, organizada por el Sree Narayana Dharma Sanghom Trust con el apoyo del Dicasterio para el Diálogo Interreligioso, el Papa Francisco destacó la importancia del respeto mutuo entre religiones para enfrentar la intolerancia y el odio que marcan el contexto global actual.
En su mensaje, el Pontífice advirtió que la falta de respeto hacia las enseñanzas religiosas es una de las principales causas de los conflictos que aquejan al mundo. “La discriminación basada en las diferencias se ha convertido en una experiencia diaria para muchas personas, especialmente para los más vulnerables”, afirmó, enfatizando la necesidad de erradicar cualquier forma de exclusión.
El legado de Sree Narayana Guru
El Papa recordó el legado del reformador social y guía espiritual hindú Sree Narayana Guru, quien dedicó su vida a la promoción de la justicia social y religiosa, rechazando el sistema de castas y proclamando la unidad de la humanidad. “Todos los seres humanos son miembros de una única familia humana, independientemente de su origen o creencias”, subrayó Francisco.
Religiones unidas por un propósito común
Bajo el lema “Las religiones juntas por una humanidad mejor”, el encuentro interreligioso reunió a líderes de diversas tradiciones para reflexionar sobre su papel en la construcción de un mundo más justo y pacífico. El Papa destacó que el fortalecimiento de la fraternidad y la inclusión son esenciales para superar las crecientes divisiones basadas en raza, lengua, religión y clase social.
Fraternidad e igualdad: pilares para la paz
El Santo Padre rememoró el Documento sobre la Fraternidad Humana, firmado en 2019 junto al Gran Imán de Al-Azhar, Ahmad Al-Tayyeb, que resalta que todos los seres humanos son iguales en dignidad y derechos. “Debemos amarnos y respetarnos unos a otros como hijos de un único Dios, cuidando nuestra casa común y promoviendo la unidad en la diversidad”, reiteró el Papa.
Un llamado a la cooperación
Finalmente, Francisco instó a todas las personas de buena voluntad a colaborar en la creación de una cultura de respeto, reconciliación y solidaridad, contraria a los valores del individualismo y la exclusión. “Solo trabajando juntos podremos construir una humanidad mejor, arraigados en nuestras convicciones religiosas y unidos en el objetivo de ser constructores de paz”, concluyó.
Esta conferencia es un recordatorio de la urgente necesidad de diálogo interreligioso como respuesta a los desafíos globales, reafirmando que el entendimiento y la cooperación son herramientas clave para combatir la intolerancia y promover una convivencia armoniosa. AICA