Estudiantes de Río Cuarto escribió una de las páginas más importantes de su historia al conseguir el ascenso a la Liga Profesional del fútbol argentino. El conjunto cordobés empató 1-1 como visitante frente a Deportivo Madryn en el Estadio Abel Sastre y, gracias al 3-1 en el resultado global, regresará a la máxima categoría después de 40 años, tras haber disputado los torneos Nacionales entre 1983 y 1985.
Dirigido por Iván Delfino, el León supo sostener la ventaja obtenida en la ida y resistió la presión de un Deportivo Madryn que volvió a quedarse a las puertas del ascenso, luego de haber perdido la final de la Primera Nacional frente a Gimnasia de Mendoza.
Un primer tiempo intenso y con protagonismo de los arqueros
El equipo local salió decidido a revertir el 0-2 de la ida y ejerció una presión alta desde el inicio. Sin embargo, más allá de algunas aproximaciones, no logró generar verdadero peligro sobre el arco de Brian Olivera. Con un duelo friccionado en la mitad de la cancha, la primera llegada clara fue de la visita: a los 21 minutos, Javier Ferreira conectó un potente cabezazo que obligó a Yair Bonnín a lucirse con una atajada notable.
Estudiantes manejó con solvencia el mediocampo, mientras que Madryn buscó sus chances con pelotazos largos que fueron bien resueltos por la defensa cordobesa, especialmente por el firme trabajo de Gonzalo Maffini.
El local tuvo su mejor oportunidad a los 33 minutos con un cabezazo de Diego Crego que salió apenas alto. Antes del entretiempo, Bonnín volvió a destacarse con varias tapadas decisivas y Federico Recalde salvó en la línea un disparo de Agustín Fontana, manteniendo con vida al Aurinegro.
Madryn se ilusionó, pero Estudiantes lo sentenció
El complemento mantuvo la intensidad y la desesperación del conjunto chubutense creció con el paso de los minutos. Galeano exigió a Olivera con un remate peligroso y, en un tramo de ida y vuelta, llegó la apertura del marcador: centro del propio Galeano y una acrobática tijera de Luis Silba para el 1-0 que alimentó el sueño del ascenso.
A partir de entonces, los dirigidos por Leandro Gracián acorralaron a Estudiantes, que respondió con contragolpes. Fontana tuvo el empate en un mano a mano, pero definió por encima del travesaño. Enseguida, un golpe clave: Recalde vio la segunda amarilla por una infracción a Agustín Morales y dejó a Madryn con diez jugadores.
El León aprovechó el envión y sentenció la serie a los pocos minutos. Morales, dentro del área, se generó el espacio y definió con precisión para el 1-1 que liquidó definitivamente las ilusiones del local. En el cierre se registraron incidentes en las tribunas que derivaron en el rápido final del partido.
Un ascenso que corona una campaña memorable
Estudiantes de Río Cuarto selló así un regreso histórico a la élite del fútbol argentino tras cuatro décadas. El equipo se clasificó al reducido tras finalizar segundo en la zona B y superó a Patronato (2-1), Gimnasia y Tiro de Salta (2-0) y Estudiantes de Buenos Aires (por ventaja deportiva tras el 1-1) antes de eliminar a Madryn.
Para el Aurinegro, en cambio, la derrota significó un duro golpe: además de haber caído en la final por el ascenso directo ante Gimnasia de Mendoza, volvió a quedarse sin la posibilidad de disputar la Primera División, categoría en la que nunca jugó.
Formaciones
Deportivo Madryn: Yair Bonnín; Agustín Sosa, Facundo Giacopuzzi, Santiago Postel, Diego Martínez; Bruno Juncos, Federico Recalde, Nazareno Solís, Diego Crego; Germán Rivero y Luis Silba.
DT: Leandro Gracián.
Estudiantes de Río Cuarto: Brian Olivera; Sergio Ojeda, Gonzalo Maffini, Juan Antonini, Lucas Angelini; Martín Garnerone, Alejandro Cabrera; Tomás González, Lucas González, Javier Ferreira y Mauro Valiente.
DT: Iván Delfino.
Estadio: Abel Sastre (Chubut)
Árbitro: Facundo Tello
VAR: Nicolás Lamolina
TV: TyC Sports

