En medio de un escándalo judicial que ha sacudido a la provincia de La Rioja, la jueza Norma Abate de Mazzucchelli ha presentado su renuncia al cargo de presidenta de la Cámara Cuarta en lo Civil, Comercial y de Minas. La dimisión llega luego de que se destapara una denuncia en su contra por presuntamente solicitar una suma exorbitante de dinero para acelerar el trámite de un expediente de sucesión.
La denuncia, que fue revelada por el programa de investigación periodística Telenoche Investiga, detalla que la jueza habría solicitado la cifra de ocho millones de pesos argentinos a Manuela Saavedra, la denunciante, con el propósito de agilizar el proceso legal. El reportaje presentó pruebas contundentes, incluyendo un video en el que se observa a Abate de Mazzucchelli discutiendo el pago del dinero, haciendo referencia a la suma percibida por los abogados que intervinieron en el caso.
La repercusión de estas acusaciones llevó incluso al gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, a exigir la separación inmediata de la magistrada de su cargo, calificando los hechos como “inaceptables y de una gravedad absoluta”. Quintela enfatizó la necesidad de una justicia transparente que proteja los derechos de los ciudadanos, subrayando la importancia de restablecer la confianza del pueblo riojano en el sistema judicial.
En respuesta a las acusaciones, Susana Medina, presidenta de la Asociación de Mujeres Juezas de Argentina, anunció que Abate de Mazzucchelli fue suspendida de su cargo como vicepresidenta primera y se le ha iniciado un sumario administrativo para investigar los hechos.
Este incidente no solo ha puesto en entredicho la integridad de una magistrada, sino que también ha generado un profundo cuestionamiento sobre la imparcialidad y la ética dentro del sistema judicial de La Rioja. Los ciudadanos esperan una pronta y exhaustiva investigación para restablecer la confianza en la justicia y garantizar el cumplimiento de sus derechos fundamentales. Con información de TN