Las fuertes precipitaciones registradas durante la mañana y el mediodía del domingo 21 de diciembre en la provincia de Misiones ocasionaron anegamientos, caída de árboles y desbordes de arroyos en varias localidades, lo que motivó múltiples intervenciones de la Policía y de los cuerpos de bomberos. A pesar de la magnitud del temporal, las autoridades informaron que no se registraron personas heridas ni fue necesario realizar evacuaciones.
Uno de los primeros incidentes se produjo alrededor de las 9:30 en la ciudad de Leandro N. Alem, cuando efectivos de la Unidad Regional VI acudieron a la intersección de la calle San Vicente y la avenida Las Heras, en el barrio Janssen, tras la caída de un árbol de gran porte que obstruyó por completo el tránsito. Con la colaboración de los Bomberos Voluntarios, se llevaron adelante tareas de despeje que permitieron normalizar la circulación vehicular.
En Posadas, cerca de las 9:00, personal de la Unidad Regional X intervino en una vivienda ubicada sobre la calle Malvinas al 6200, en el barrio Kennedy, que resultó inundada como consecuencia de la intensa lluvia caída en un corto período de tiempo. En el lugar reside una mujer de 75 años que sufrió una descompensación vinculada a un cuadro de hipertensión, por lo que se solicitó asistencia médica. Asimismo, se realizaron tareas preventivas para resguardar a la vecina y sus pertenencias, con apoyo del cuerpo de bomberos.
Más tarde, alrededor de las 11:15, efectivos policiales de la jurisdicción de Santa Ana, junto a la División Bomberos, asistieron a vecinos del barrio Martín Chico tras el desborde del arroyo homónimo. La creciente provocó daños materiales en cercos perimetrales de dos viviendas y en un muro, aunque luego de un relevamiento de la zona se descartaron riesgos adicionales. No se registraron heridos ni fue necesario realizar rescates.
Finalmente, cerca de las 13:42, se constató el desborde del arroyo Garupá sobre un puente ubicado en un camino vecinal que conecta los parajes Tacuaruzú y Sol de Mayo, principal acceso a la comunidad aborigen Urunday-Tí. En ese sector no se reportaron viviendas afectadas por la anegación.
Las tareas de monitoreo y prevención continúan en las zonas comprometidas, con un trabajo coordinado entre la Policía de Misiones, los bomberos y las áreas municipales, ante la persistencia de condiciones climáticas inestables en la provincia.

