En una conversación telefónica mantenida este lunes con el presidente del Estado de Palestina, Mahmoud Abbas, el papa León XIV renovó su llamado al “pleno respeto del Derecho Internacional Humanitario”, con un enfático pedido de protección a los civiles y a los lugares sagrados en medio del conflicto en la Franja de Gaza.
Según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el pontífice destacó la “prohibición del uso indiscriminado de la fuerza” y el rechazo a los desplazamientos forzados de la población. Durante el diálogo, el Papa expresó su “profunda preocupación” por la “dramática situación humanitaria” que atraviesan miles de palestinos, especialmente niños, ancianos y enfermos, afectados por la guerra en curso.
El llamado del Santo Padre se produce tras el reciente ataque militar israelí que alcanzó el complejo de la iglesia de la Sagrada Familia en Gaza el pasado jueves 17 de julio. El ataque dejó como saldo tres muertos y varios heridos, entre ellos el párroco local, padre Gabriel Romanelli IVE, quien sufrió lesiones leves.
Frente a este escenario, León XIV insistió en la “urgencia de garantizar la asistencia a las personas más vulnerables” y de facilitar el ingreso de ayuda humanitaria en el enclave palestino. En ese sentido, pidió que se respeten los espacios religiosos como “lugares de refugio y esperanza” para la población civil.
Durante la conversación, también recordó el décimo aniversario del Acuerdo Global entre la Santa Sede y el Estado de Palestina, firmado en 2015 y vigente desde enero de 2016, como un compromiso común a favor del diálogo y la paz.
En paralelo, la Oficina del Primer Ministro de Israel emitió un comunicado tras el ataque a la única parroquia católica en Gaza, mientras que el propio Benjamin Netanyahu se comunicó con el Papa en las últimas horas.
Desde el Vaticano, León XIV reiteró su llamado a un inmediato alto el fuego en Gaza y al cese definitivo de la guerra. “El sufrimiento de los inocentes no puede seguir siendo ignorado”, enfatizó el pontífice.