La Secretaría de Comercio avanza en una nueva resolución que permitirá a los comercios mostrar precios en ambas monedas, actualizando una normativa que data de 2002. La iniciativa se complementará con la posibilidad de realizar pagos en dólares a través de tarjetas de débito.
En agosto, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció que se ultiman detalles para emitir tarjetas de débito en dólares, permitiendo a los consumidores utilizar sus ahorros en moneda extranjera depositados en cuentas CERA. Este avance forma parte de una estrategia que busca dinamizar el uso de dólares en el mercado interno, facilitando la compra de bienes y servicios dolarizados.
Exhibición en góndola: una nueva era
Fuentes del sector comercial confirmaron que se trabaja en la derogación de la resolución 7/2002. Según esta normativa, los precios en moneda extranjera deben exhibirse con caracteres menos destacados que los correspondientes en pesos. El cambio propuesto establece igualdad en el tamaño de los precios, habilitando su exhibición simultánea en pesos y dólares.
Inicialmente, este esquema estará orientado a sectores tradicionalmente dolarizados, como automóviles, inmuebles y embarcaciones, dejando fuera, por el momento, a productos básicos de consumo masivo. “No está pensado para la lata de tomate en un supermercado, al menos no en esta primera etapa”, explicó una fuente oficial.
Pagos en dólares: implementación en marcha
El Banco Central informó que no serán necesarios cambios normativos para habilitar pagos en dólares mediante tarjetas de débito. Las principales compañías de tarjetas, como Visa, ya tienen la tecnología lista para implementar este sistema, que permitirá a los consumidores utilizar terminales de pago y plataformas de comercio electrónico.
Adicionalmente, comercios que opten por vender en dólares podrán recibir pagos en efectivo o mediante transferencias bancarias en la misma moneda, lo que podría acelerar el uso de dólares para el consumo sin requerir tarjetas.
Esta medida, alineada con los objetivos del gobierno de promover el gasto de dólares declarados, busca ofrecer mayor flexibilidad a los consumidores en un contexto económico donde el bimonetarismo ya es una realidad en diversos sectores. Infobae