El gobernador Maximiliano Pullaro, desde su asunción, ha marcado como uno de los principales objetivos de su gestión en Santa Fe el combate al narcotráfico y la inseguridad.
En este contexto, el fin de semana pasado, se llevó a cabo una requisa sorpresa en la cárcel de Piñero, un penal clave en la región por su vinculación con el narcotráfico y la actividad de sicarios. El mandatario, junto a su ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, compartieron en redes sociales imágenes del operativo, que guardan similitudes con las realizadas en El Salvador en su lucha contra las pandillas.
«Tenemos un plan de seguridad, sabemos cómo llevarlo adelante y estamos trabajando para eso. Desde las cárceles salen las órdenes para hacerle la vida imposible a los santafesinos», señaló el gobernador en un posteo desafiante, acompañado de fotografías que muestran a los reclusos, despojados de camisetas, sentados en el suelo bajo estricta custodia.
Pullaro afirmó contundentemente: «No vamos a retroceder ante las amenazas. Tenemos el mandato del pueblo santafesino para restaurar la tranquilidad de los vecinos. Los presos están presos, no vamos a aceptar ninguna extorsión y si no lo entienden, cada vez la van a pasar peor».
Requisa en la cárcel de Piñero: Acción determinada
La requisa se llevó a cabo en cuatro pabellones de la Unidad Penitenciaria Nº 11 de Piñero, identificada como un punto estratégico para los narcos de Rosario. Este operativo ocurrió en medio de un clima de endurecimiento de las medidas de control a los presos, impulsado por el gobernador Pullaro, tras un reciente ataque armado a un micro que trasladaba penitenciarios en la zona de Circunvalación.
Durante la intervención, se decomisaron armas blancas, teléfonos celulares y chips, los cuales fueron puestos a disposición de la Justicia. Lucía Masneri Calderari, secretaria de Asuntos Penales, detalló que cerca de 250 personas fueron registradas en sus espacios de alojamiento, incluyendo la revisión por rayos X para detectar posibles objetos ocultos en sus cuerpos.
La cárcel de Piñero ha sido escenario de episodios violentos en el pasado, incluyendo un intento de liberación de detenidos mediante un ataque armado en 2021, que resultó en la muerte de varios delincuentes. Como respuesta, se trasladó a varios presos de alto perfil al Servicio Penitenciario Federal.
En esta nueva etapa, el Ministerio de Justicia y Seguridad de Santa Fe ha intensificado los controles, especialmente sobre aquellos internos considerados de alto perfil, sospechados o sindicados de dirigir actividades delictivas desde dentro de la cárcel.
Desde el inicio de esta gestión, se ha observado una reorganización significativa en el sistema carcelario de Santa Fe, incluyendo el traslado de más de 1200 detenidos de comisarías a unidades penitenciarias, así como medidas de seguridad reforzadas en las visitas a reclusos de alto perfil.
El Gobierno de Santa Fe, bajo el liderazgo de Maximiliano Pullaro, reafirma su compromiso con la seguridad y el orden en la provincia, dejando en claro que no tolerará actividades delictivas desde ningún ámbito, incluyendo el sistema penitenciario