El Gobierno anuncia una reestructuración profunda de la AFI y la formación de nuevos equipos


El Gobierno argentino ha lanzado un plan integral para renovar la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), buscando implementar cambios significativos en su estructura y funcionamiento. La cúpula del Ejecutivo está decidida a realizar una considerable reducción en el personal actual de la agencia, con el objetivo de revitalizarla.

En este contexto, se ha filtrado desde la Casa Rosada la intención de cambiar el nombre de la agencia y establecer una nueva división de asignaciones que rendirá cuentas directamente al núcleo presidencial, conformado por Javier Milei, la secretaria general, Karina Milei, y el asesor Santiago Caputo.

Entre los descartados para liderar esta nueva etapa de la AFI se encuentran el subsecretario de Gestión Institucional, Eduardo “Lule” Menem, y el apoderado de La Libertad Avanza, el abogado Santiago Viola. Se prevé que el sucesor de Silvestre Sívori, quien respondía anteriormente al exjefe de gabinete Nicolás Posse, será un dirigente con un perfil más discreto y afín a Caputo.

Uno de los nombres que ha cobrado fuerza para ocupar este rol es el de Sergio Neiffert, actual representante de Nación en la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR), y ex tesorero del Consejo Escolar del ex intendente de Malvinas Argentinas Jesús Cariglino.

El asesor presidencial Santiago Caputo, quien ha asumido un rol preponderante en ausencia del presidente y la secretaria general durante su viaje a los Estados Unidos, está liderando las discusiones y toma de decisiones en relación con el futuro de la AFI. Su influencia se ha vuelto notable en la Casa Rosada, siendo consultado por funcionarios de alto rango y asumiendo responsabilidades clave en la gestión gubernamental.

En declaraciones recientes, el jefe de gabinete Guillermo Francos ha anticipado la reestructuración de las funciones directivas de la agencia de inteligencia argentina. Se espera que esta transformación permita una mayor eficacia en la recolección y análisis de información tanto a nivel nacional como internacional, enfocándose en aspectos clave como el crimen organizado, las fronteras y el narcotráfico.

En medio de este proceso de cambio, aún no se han definido aspectos importantes, como la posible división de funciones dentro de la AFI y el destino del edificio actualmente ocupado por la agencia en la calle 25 de Mayo.

El Gobierno anunciará oficialmente las medidas concretas una vez que el presidente Milei regrese de su viaje al exterior. Mientras tanto, la incertidumbre y la expectativa rodean el futuro de la inteligencia nacional en Argentina. TN