El Banco Central de la República Argentina (BCRA), bajo la dirección de Santiago Bausili, anunció una nueva flexibilización en el cepo cambiario para las empresas. A partir del lunes 21 de octubre, todas las importaciones deberán pagarse en un plazo máximo de 30 días, una medida que busca normalizar el acceso al mercado de cambios para el comercio exterior.
En un comunicado oficial, el BCRA explicó que esta decisión acorta los plazos de acceso al mercado de cambios (MLC) para el pago de importaciones, un paso que busca aumentar la previsibilidad en la cadena productiva. “Los bienes que anteriormente tenían plazos de pago de hasta 60 días podrán ser abonados a los 30 días desde el registro de ingreso aduanero”, se informó.
Este cambio unifica los plazos de pago para todos los bienes, con excepción de aquellos con acceso inmediato al MLC, como es el caso de la energía. Anteriormente, solo los autos y bienes de lujo tenían un plazo extendido de 60 días, lo que representaba el 50% de las importaciones. Ahora, se establece un marco de tiempo más ágil y equitativo para todas las empresas, independientemente de su tamaño.
Desde el BCRA, se destacó que esta medida tiene un doble efecto positivo: por un lado, impulsa la reactivación económica y, por otro, busca reducir el impacto en los precios de los bienes. En reacción a esta disposición, el ministro de Economía, Luis Caputo, celebró en sus redes sociales que el mercado de cambios continúa normalizándose.
En otra medida reciente, el BCRA también amplió las facilidades para los profesionales freelance que exportan servicios. A partir de ahora, podrán ingresar hasta 24,000 dólares anuales sin necesidad de convertirlos a pesos, un monto que se duplicó bajo la gestión de Javier Milei. El plazo para ingresar estos fondos se extendió de cinco a 20 días, permitiendo a los freelancers agrupar pagos en una única transferencia, lo que reducirá costos asociados a la recepción de transferencias internacionales.
Estas medidas reflejan un esfuerzo continuo por parte del BCRA para estabilizar el mercado cambiario y fomentar un entorno más favorable para las empresas y profesionales argentinos. TN