Consultoras prevén que la inflación de mayo rondará entre 2% y 2,5% impulsada por la baja en alimentos y estabilidad cambiaria


Tras el 2,8% registrado en abril, analistas del sector privado anticipan una nueva desaceleración inflacionaria en mayo, con proyecciones que ubican el Índice de Precios al Consumidor (IPC) entre el 2% y el 2,5% mensual. La principal causa es la menor presión del rubro de alimentos y bebidas, sumado a la estabilidad cambiaria luego de la salida del cepo.

De acuerdo al Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, el índice de inflación proyectado para mayo se sitúa en 2,8%, aunque diversas consultoras privadas manejan estimaciones más optimistas. Por ejemplo, EcoGo calcula una suba del 2,2% mensual, atribuido a menores incrementos en alimentos, especialmente los consumidos fuera del hogar, y una caída en los precios de productos estacionales como frutas, verduras y servicios vinculados al turismo.

Durante la segunda semana del mes, los alimentos mostraron una leve alza del 0,4% en el hogar. Las carnes, que venían con fuertes aumentos en meses anteriores, se desaceleraron y marcaron apenas un 0,2% de incremento. El pollo subió 1,1% y la carne vacuna 0,2%, mientras que el cerdo cayó 0,2%. Las frutas y verduras también retrocedieron, con descensos del 0,2% y 0,9%, respectivamente.

En lo que va de mayo, los alimentos acumulan un alza del 1,8%. Esto implicaría una inflación mensual de 2,5% para los alimentos consumidos tanto dentro como fuera del hogar.

El Hot Sale también tuvo impacto en la medición. Según EcoGo, algunos rubros como “equipamiento y mantenimiento del hogar” registraron incrementos significativos previos al evento de descuentos: artículos varios del hogar subieron 6,4%, la vajilla 4,7% y los colchones 4,5%.

Desde la consultora PxQ, que dirige Emmanuel Álvarez Agis, se destacó la incidencia de los precios regulados en la primera semana de mayo. El gas subió 3%, el transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) registró aumentos del 5% en colectivos y del 5,8% en subte y premetro. También se observaron alzas en tarifas de electricidad (2,4%), agua (1%) y servicios de comunicación (3%).

En contrapartida, los combustibles moderaron el índice, con una caída del 3,5% en sus precios, sobre todo en el segmento regular.

El economista Ricardo Delgado, de Analytica, proyectó una inflación del 2,6% para mayo, impulsada por la baja en alimentos y el freno en los combustibles. “La estabilidad cambiaria y ajustes moderados en regulados contribuyen a la desaceleración”, afirmó.

Fausto Spotorno, de OJF & Asociados, también señaló que “mayo viene muy bien” y estimó una inflación general entre el 2% y el 2,5%. En la primera semana del mes, la suba de precios fue de 0,9%, impulsada por esparcimiento (4,3%) y vivienda (3,5%).

Camilo Tiscornia, de C&T Asesores Económicos, y Eugenio Marí, de Libertad y Progreso, coincidieron en que la inflación se moderó gracias al freno en alimentos y la estabilidad cambiaria. Marí estimó una suba de 2,6% para mayo y destacó la baja en el riesgo internacional y la reducción del 4% en combustibles como factores positivos.

Desde el Banco Central, el vicepresidente Vladimir Werning sostuvo recientemente que “más allá de cualquier aumento puntual, los fundamentos macroeconómicos siguen apuntando a una baja sostenida de la nominalidad”.

En cuanto a los datos regionales, el IPC de la Ciudad de Buenos Aires registró en abril una suba del 2,3%, inferior al 3,2% de marzo. El alza interanual fue del 52,4% y el acumulado del primer cuatrimestre de 2025 cerró en 11,1%. Alimentos y bebidas no alcohólicas subió 2,2% con incrementos en carnes (5%) y lácteos (3,8%), aunque se registraron bajas en verduras y legumbres.

Con estas proyecciones, mayo podría consolidarse como el mes con menor inflación desde 2022, aunque los especialistas advierten que los indicadores siguen sujetos a volatilidades sectoriales puntuales. Infobae