El conflicto gremial en Aerolíneas Argentinas se intensifica mientras los pilotos continúan disfrutando de beneficios que desatan polémica en el sector. Los empleados de la línea aérea de bandera cuentan con una serie de privilegios que incluyen pasajes gratuitos e ilimitados, no solo para ellos, sino también para familiares y allegados. Estos beneficios han sido duramente criticados por el gobierno, que ha comenzado a referirse a la “casta aeronáutica” mientras avanza en las negociaciones para la posible venta de la empresa.
El enfrentamiento entre el gobierno y los gremios aeronáuticos se ha agravado en las últimas semanas debido a las medidas de fuerza implementadas por los sindicatos, como la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA). Estas huelgas han provocado la cancelación de vuelos y generado inconvenientes para miles de pasajeros en todo el país. Sin embargo, los beneficios exclusivos que disfrutan los pilotos han centrado la atención en el conflicto.
Los privilegios que generan controversia
Un informe de Recursos Humanos de Aerolíneas Argentinas revela que los pilotos tienen acceso a una serie de ventajas incluidas en su convenio colectivo de trabajo. Entre ellas, destacan los pasajes gratuitos para los empleados, sus familias e incluso allegados, tanto en vuelos nacionales como internacionales. Algunos de estos beneficios se extienden incluso después de la jubilación, permitiendo que los pilotos sigan disfrutando de vuelos gratuitos sin límite de cantidad.
El paquete de privilegios incluye también el derecho a pasajes para lunas de miel y bodas, no solo para los empleados, sino también para sus hijos. Además, los pilotos pueden adquirir pasajes con descuentos que varían entre el 10% y 25%, dependiendo del tipo de vuelo, y acceder a boletos gratuitos durante las festividades si deben trabajar fuera de su base habitual.
El debate por los pasajes en clase ejecutiva
Uno de los puntos más conflictivos es el acceso a pasajes en clase ejecutiva. Hasta hace poco, los pilotos y sus familias podían viajar en esta clase de manera preferencial. No obstante, Aerolíneas Argentinas suspendió este beneficio en medio de las protestas gremiales. La empresa argumentó que, aunque el derecho está contemplado en el convenio colectivo, no lo reimplementará hasta que la Justicia lo exija. Según fuentes oficiales, este beneficio le cuesta al país unos 20 millones de dólares anuales, financiados por los contribuyentes.
En un vuelo reciente a Punta Cana, el gobierno denunció que la mitad de los asientos en clase ejecutiva fueron ocupados por pilotos y sus familias. Esta situación ha generado malestar en la administración actual, que considera inaceptable mantener estos privilegios mientras la empresa registra pérdidas significativas, estimadas en 390 millones de dólares el año pasado.
Perspectivas del conflicto
En medio de la creciente tensión, el gobierno ha defendido su postura de reducir los gastos y mejorar la eficiencia de la aerolínea estatal, mientras explora la posibilidad de venderla a inversionistas privados. Sin embargo, los sindicatos han anunciado nuevas medidas de fuerza, lo que presagia semanas de conflicto. Al mismo tiempo, el término “casta aeronáutica”, utilizado por funcionarios como el secretario de Transporte Franco Mogetta, sigue resonando en las redes sociales y los medios, reforzando la imagen de los gremios como defensores de privilegios desmedidos en un momento de austeridad fiscal.
Las próximas semanas serán clave para definir el futuro de Aerolíneas Argentinas y los beneficios que disfrutan sus empleados, en medio de un clima social marcado por protestas y negociaciones. Infobae