Investigadoras del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y del Instituto Nacional de Medicina Tropical (INMeT) – ANLIS Malbrán, junto a expertos del Instituto Nacional de Limnología, el Hospital San Lucas de Colonia Aurora y el Instituto Misionero de Biodiversidad (IMiBio), han confirmado la presencia de medusas de agua dulce en arroyos de Misiones. Esta especie invasora, Craspedacusta sowerbii, representa un riesgo para la salud humana debido a las lesiones que su contacto puede provocar.
Investigación y hallazgos científicos
El estudio, titulado “Medusas de agua dulce en el noreste argentino: un riesgo para la salud humana”, fue publicado recientemente en la revista científica Transactions of the Royal Society of Tropical Medicine and Hygiene. En él se detallan casos de personas afectadas tras el contacto con estas medusas en el arroyo Saltiño, ubicado en Colonia Aurora, quienes sufrieron desde dermatitis hasta edemas severos.
Las investigadoras explican que la Craspedacusta sowerbii, originaria del río Yangtsé en China, se ha expandido globalmente y ahora amenaza ecosistemas locales. “Este hallazgo es fundamental para que los profesionales de la salud puedan diagnosticar y tratar las lesiones causadas por este contacto”, declararon en su publicación.
Expansión de la especie y riesgos en Misiones
Desde su primer avistamiento en el arroyo El Saltito en 2022, la Craspedacusta sowerbii también ha sido identificada en el arroyo Cazador en San Ignacio, evidenciando su capacidad de colonización rápida. Las investigadoras advierten a la población sobre los riesgos asociados a su expansión, especialmente ante la llegada del verano. El contacto con sus tentáculos puede provocar lesiones en la piel, incluyendo necrosis y reacciones alérgicas graves.
El IMiBio ha instado a la población a reportar cualquier avistamiento de medusas a través de sus redes sociales y a evitar el contacto directo con la especie.
Características de la Craspedacusta sowerbii
La Craspedacusta sowerbii es una medusa dulce que puede medir hasta 25 milímetros y presenta una apariencia translúcida, con tonos que van del blanquecino al verdoso. Dotada de entre 50 y 500 tentáculos, algunos largos para mantenerse en posición y otros cortos destinados a la alimentación, esta especie dispone de nematocistos, células urticantes que se activan al contacto, liberando pequeñas toxinas para inmovilizar a sus presas o defenderse de posibles amenazas.
Esta confirmación de la presencia de medusas de agua dulce en Misiones y su potencial impacto en la salud humana plantea un nuevo reto para los ecosistemas acuáticos locales y los equipos de salud que ya están trabajando en estrategias de respuesta.