La comunidad y allegados de la Hna. Rogelia Ludmila Alles celebran con inmensa gratitud y alegría el centenario de vida de esta querida religiosa. Nacida el 18 de junio de 1924 en el pintoresco pueblo de Puerto Rico, ella es una de los 18 hijos de Wilibaldo Alles y Crecencia Persch, y se ha convertido en un preciado regalo para su familia y para todos los que han tenido el privilegio de conocerla.
La vida de la Hna. Rogelia es un testimonio viviente del amor misericordioso de Dios, quien ha permitido que cumpla 100 años de existencia. Desde sus primeros días en el hogar familiar, ella mostró una dedicación especial, no solo a sus padres y hermanos, muchos de los cuales ya descansan en los brazos del Padre, sino también al llamado divino que la llevaría a una vida de servicio religioso.
Imitando a María en su fidelidad al Proyecto de Dios, la Hna. Rogelia dijo «Sí» a su vocación religiosa y nunca miró atrás. Con más de 75 años de Vida Religiosa, ha sido una discípula fiel y una dócil caminante en los pasos de Jesús Misionero, haciendo presente el Reino de Dios allí donde fue conducida.
Su trayectoria ha sido marcada por la siembra de FE, amor y alegría, enfrentando tanto gozos como las dificultades inherentes a toda vida. Con la asistencia del Espíritu Santo, la Hna. Rogelia ha fructificado los abundantes dones que Dios le ha otorgado, poniéndolos al servicio de la comunidad y en la misión confiada por su Congregación.
En estos 100 años de juventud acumulada, la Hna. Rogelia no solo presenta sus limitaciones físicas al Señor, sino también un profundo agradecimiento por todas las bendiciones recibidas. Su vida es un ejemplo de entrega orante y gozosa que inspira a todos los que la rodean.
Que Dios siga derramando copiosas bendiciones sobre la Hna. Rogelia y que su ejemplo continúe animando a la comunidad a vivir con fe y alegría.