En la mañana de hoy, representantes de Cáritas Diocesana realizaron una visita a la capilla Niño Jesús de Praga, ubicada en el corazón del barrio La Ripiera en Garupá. Esta iniciativa se enmarca en el compromiso continuo de Cáritas con las comunidades más necesitadas.
La capilla, que alberga uno de los cinco espacios educativos Emaús, desempeña un papel vital en el apoyo a los niños del barrio. Actualmente, “cerca de cien pequeños reciben meriendas y apoyo escolar gracias a esta iniciativa”.
Durante la visita, se entregaron útiles escolares, una contribución invaluable proveniente del sindicato de Luz y Fuerza. Según señaló Cáritas en su página de Facebook, “estos materiales servirán como herramientas fundamentales para el desarrollo académico de los niños”.
Además de los útiles, también se distribuyeron repelentes, una ayuda oportuna en la lucha contra la epidemia de dengue que azota al país. Estos repelentes, donados a Cáritas Nacional desde México, “reflejan la solidaridad internacional en tiempos de necesidad”.
Esta acción solidaria refleja el compromiso inquebrantable de Cáritas Diocesana con las comunidades más vulnerables. Es un tributo al altruismo y dedicación de aquellos que generosamente brindan su tiempo y esfuerzo para hacer posible esta labor.
En sintonía con las palabras del Papa Francisco, que resuenan profundamente en el quehacer diario de Cáritas y sus colaboradores, la solidaridad se manifiesta en el pensamiento y la acción en favor de la comunidad, priorizando el bienestar de todos.
Finalmente, desde Cáritas Diocesana, se eleva una plegaria por la protección y la bendición divina sobre nuestro pueblo: “Que Jesús y la Virgen de Itatí cuiden y bendigan a nuestra comunidad”.
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