La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, solicitó la renuncia del secretario de Seguridad, Vicente Ventura Barreiro, debido a irregularidades en sus funciones. «Este Gobierno ha asumido un compromiso con la transparencia de la gestión», declaró Bullrich en su cuenta oficial de X.
La salida de Ventura Barreiro se produjo por su intento de interferir en un proceso licitatorio de servicios de comida para el Servicio Penitenciario Federal. Bullrich aseguró que la denuncia correspondiente fue presentada ante la Oficina Anticorrupción para que intervenga en el caso.
Según la ministra, esta licitación es un proceso sin precedentes que rompe con un monopolio de muchos años, permitiendo la participación de más de 300 empresas, en contraste con las 15 que históricamente habían dominado este tipo de contrataciones. «En la gestión del presidente Javier Milei, la transparencia es nuestra bandera», afirmó.
El despido de Ventura Barreiro, quien tenía un papel protagónico en los operativos antipiquetes y en la gestión diaria de la cartera de seguridad, generó un fuerte impacto dentro del PRO. Algunos lo interpretan como una represalia de Bullrich por la derrota en el partido bonaerense, donde su alianza con Diego Valenzuela la distanció de Cristian Ritondo y otros intendentes.
Este conflicto interno se suma a otro reciente en el Gobierno, cuando Sandra Pettovello, del Ministerio de Capital Humano, despidió a un funcionario clave por un posible caso de corrupción. Pablo De la Torre, exsecretario de Niñez y Familia, fue responsabilizado por la falta de distribución de alimentos comprados durante la administración de Alberto Fernández, que permanecieron almacenados en depósitos de Villa Martelli y Tafí Viejo, pese a la orden judicial de repartirlos inmediatamente.
El anuncio de Bullrich y las acciones tomadas resaltan el enfoque del gobierno de Javier Milei en la lucha contra la corrupción y la transparencia en la gestión pública.