Tras las elecciones legislativas nacionales celebradas el pasado fin de semana, Humberto Ferreira, profesor de Historia y secretario de la Comisión de Justicia y Paz de la Diócesis de Posadas, ofreció un análisis de los resultados y la participación ciudadana, resaltando tanto los avances como los desafíos de la democracia en la provincia de Misiones.
En diálogo con Nuestras Mañanas, Ferreira destacó que la participación electoral fue la más baja desde el retorno a la democracia en 1983. “Esto nos lleva a reflexionar como ciudadanos: ¿las propuestas de los dirigentes siguen siendo válidas o ya no logran atraer a la ciudadanía? La democracia se construye día a día y con cada acto electoral, y la participación es esencial”, subrayó.
El académico valoró la implementación de la Boleta Única de Papel (BUP), que permitió un conteo más ágil y redujo significativamente los votos nulos o recurridos. Sin embargo, señaló que la experiencia se limita por el reducido número de categorías en juego y abogó por avanzar hacia métodos más modernos, como el voto electrónico o por correo, que ya se utilizan en otros países de la región.
Ferreira también analizó la campaña electoral, marcada por la crítica entre candidatos y la ausencia de propuestas concretas. “Muchos candidatos se centraron en señalar los errores del otro o en el insulto, dejando de lado los problemas reales de la provincia, como la producción primaria o la desigualdad territorial. Esto afecta la calidad de la democracia, porque el ciudadano no recibe información clara sobre las políticas que podrían implementarse”, afirmó.
En cuanto a los resultados en Misiones, el docente destacó la polarización entre el oficialismo y la oposición de La Libertad Avanza (LLA), señalando que la fuerza opositora logró un porcentaje significativo de votos que podría representar un desafío para el oficialismo en futuros comicios provinciales. Ferreira también mencionó la influencia del aparato estatal y la movilización de los intendentes en los resultados electorales, así como la tendencia de ciertos sectores jóvenes a abstenerse como forma de protesta.
Respecto al contexto nacional, Ferreira opinó que las reformas que el gobierno busca implementar requieren consenso legislativo y participación ciudadana. “No podemos imponer cambios sin diálogo; las reformas laborales, impositivas o sociales deben adaptarse a la realidad actual y hacerse con altura institucional”, explicó, haciendo comparaciones con experiencias de otros países como Dinamarca y Brasil.
Finalmente, Ferreira remarcó la necesidad de que la ciudadanía pase de ser “habitante a ciudadano”, participando activamente en la construcción de una sociedad basada en el diálogo y el respeto. “La dirigencia debe avanzar hacia consensos generales para superar las crispaciones y mirar hacia el futuro”, concluyó.

