En una contundente respuesta a las recientes declaraciones del presidente venezolano Nicolás Maduro, quien calificó al presidente argentino Javier Milei de “un malparido nazi fascista”, el Gobierno argentino, a través del vocero presidencial Manuel Adorni, expresó: “El respeto por los derechos humanos no depende de la buena voluntad de un presidente autoritario ni de su séquito de obsecuentes”. Adorni también enfatizó la importancia de que en Venezuela se respete el proceso electoral y la integridad de los participantes en los comicios del próximo domingo.
El pasado viernes, Argentina firmó un comunicado junto a Costa Rica, Guatemala, Paraguay y Uruguay, instando al respeto del proceso electoral en Venezuela. La Cancillería, encabezada por Diana Mondino, anunció el regreso de Argentina a la denuncia presentada en 2018 ante la Corte Penal Internacional (CPI), solicitando investigar al régimen de Caracas por violaciones sistemáticas de derechos humanos. Esta denuncia había sido retirada en marzo de 2021 por el entonces presidente Alberto Fernández.
“El respeto por los derechos humanos no depende de la buena voluntad de un presidente autoritario ni de su séquito de obsecuentes”, consignó Adorni. En el comunicado, el ministerio de Relaciones Exteriores exigió el cese inmediato del hostigamiento y represión contra activistas políticos y sociales de la oposición, así como la liberación de todos los presos políticos.
Maduro, durante un acto en el estado de Nueva Esparta, Venezuela, reiteró sus agravios hacia Milei, lo que ha exacerbado la tensión política entre ambos países. “Ese Milei es un malparido nazi fascista, es un malparido que le está pasando la motosierra a los trabajadores, a las trabajadoras”, declaró Maduro.
En marzo de 2021, la gestión de Alberto Fernández había retirado el apoyo de Argentina a la denuncia contra el régimen venezolano ante la CPI y anunció la salida del Grupo de Lima, un foro regional alineado con Estados Unidos. Sin embargo, el actual gobierno ha decidido reincorporarse a la denuncia y continuar con su postura crítica hacia el gobierno de Maduro.
El informe que respalda la denuncia incluye testimonios de víctimas y testigos de agresiones contra opositores al régimen venezolano, señalando 131 víctimas de asesinatos durante las protestas de 2014 y 2017, 8.292 ejecuciones extrajudiciales desde 2015, y más de 12 mil detenciones arbitrarias desde 2013.
La situación en Venezuela sigue siendo tensa, especialmente con las próximas elecciones en las que el candidato opositor Edmundo González Urrutia lidera las encuestas, generando inquietud en el oficialismo y amenazas de Maduro sobre un posible “baño de sangre” en caso de ser derrotado. Infobae