Argentina ha dado un histórico paso en su política exterior al solicitar oficialmente formar parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) como “socio global”. Esta solicitud se realizó por instrucción del presidente Javier Milei y fue llevada a cabo por el ministro de Defensa, Luis Petri, quien se reunió con Mircea Geoana, número 2 de la OTAN, en Bruselas, Bélgica, sede de la organización.
La intención detrás de esta solicitud es modernizar y capacitar a las Fuerzas Armadas argentinas al estándar de la OTAN, así como aumentar el compromiso del país con las potencias occidentales. Durante el encuentro, se discutieron diversos temas, incluyendo la participación de Argentina en operaciones de paz, ciberdefensa, lucha contra la desinformación y seguridad marítima, entre otros.
Si bien la solicitud fue recibida de manera positiva, su aprobación y avance dependen de la decisión de los países miembros clave de la OTAN, como Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania y Francia.
Ser parte de la OTAN implicaría para Argentina un importante salto de status en el ámbito internacional, así como acceso a equipamiento para las Fuerzas Armadas, adiestramiento militar y colaboración en temas de seguridad global.
Además, el ministro Petri realizará gestiones en Noruega para destrabar la compra de aviones noruegos destinados a la videovigilancia marítima, como parte de la estrategia de fortalecimiento de la defensa nacional.