A diferencia de los híper y supermercados, donde las ventas siguen teniendo buen ritmo, la actividad en autoservicios y cadenas regionales volvió a caer en marzo, mes en el que la inflación fue del 7,7%.
En los comercios de cercanía, la caída promedió el 7,6% y se aceleró en la primera semana de abril.
En este sector se incluyen los autoservicios chinos, muchos de los cuales están cerrando.
En tanto, las cadenas regionales, localizadas en el interior del país, retrocedieron 11,2% en el mismo lapso, según midió la firma Scanntech.
En esas boca de expendio, todas las familias de productos pierden en consumo en el primer trimestre del año: Alimentos (-15,7%) al igual que Cuidado Personal (-12,2%) son las de mayor caída mientras que Limpieza (-7,4) y Bebidas (-2,1) presentan variaciones negativas de menor magnitud.
Tras procesar 9,5 millones de tickets en el mes, la consultora detectó que la compra promedio en los autoservicios fue de $1.337, incluyendo 4,4 unidades.
El relevamiento arrojó también que crece la frecuencia de visita al canal en torno del 5,1% durante el acumulado del 2023, pero con una transacción promedio menor en cantidad de unidades.
En las cadenas regionales, donde el ticket de compra promedio fue de $2.395, incluyendo 8,2 unidades, las ventas cayeron al compás de una inflación anual del 122,8% -superior a la media- en esas superficies.
La razón fundamental de la baja en las ventas de estos negocios es el impacto de los precios.
En el caso de los autoservicios, subieron 6,4% en marzo y acumulan a nivel interanual una suba del 128%.
La brecha de precios entre estos puntos de venta y las grandes cadenas llega al 22% este año, frente al 28% que llegó a tocar el año pasado, cuando históricamente fue de 10 por ciento.
Los comercios de cercanía como los autoservicios fueron señalado por el secretario de Comercio, Matías Tombolini, por tener precios más altos.
En el sector se defienden y aseguran que los Precios Justos no llegan, ya que las alimenticias les venden más caro.
Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market, indicó que en los autoservicios de hasta 500 metros cuadrados, la primera semana de abril comenzó con caída de 13,7% en ventas.
En el caso de cadenas de supermercados regionales, el escenario es aún peor, con caída del 23,1%.
La aceleración de la inflación, sumada al desplazamiento de los consumidores hacia grandes superficies comerciales en el intento de encontrar Precios Justos, está generando este comportamiento del consumo, según los especialistas.
Desde noviembre del año pasado, los consumidores tienen posibilidad de comprar en las góndolas una canasta de alrededor de 2.000 productos que mantienen congelado su precio, mientras el resto de los artículos que se comercializan en ese canal tienen un tope de suba del 3,2% mensual hasta junio.
Mediciones de la consultora Scentia, que releva los volúmenes vendidos de alimentos, bebidas y productos de higiene, limpieza y tocador, incluidas las grandes cadenas de supermercados, confirman la diferencia de precios entre los diferentes canales de venta.
En los comercios de cercanía, donde compran los consumidores de menores ingresos, refleja el deterioro del poder adquisitivo, según esas consultoras. NA.