La persistencia de los reclamos docentes con piquetes en las rutas está comenzando a generar un desgaste significativo en el ánimo de la población y pérdidas económicas en sectores clave como el turismo y el transporte de cargas. Sin cuestionar la legitimidad del reclamo, pero criticando las formas, se multiplican las voces en contra de los cortes de ruta.
Uno de los sectores más afectados es el transporte de cargas. Gabriel Silva, presidente de la Cámara de Empresarios Misioneros del Autotransporte de Cargas (CEMAC), declaró que “sumado a todo el parate económico, hay poco trabajo y los cortes nos complican mucho”.
En declaraciones a Santa María de las Misiones, Silva explicó que, aunque entienden los motivos de los cortes, las paradas frecuentes y prolongadas impactan negativamente: “Estar andando 10 kilómetros y parando, después hacer 100 kilómetros y parar de vuelta 3, 4, 5 horas, la verdad que nos complica mucho porque estamos llevando toda la mercadería a la provincia o sacando la producción de la provincia”.
Las horas perdidas en la ruta se traducen en pérdidas económicas significativas para el sector. “Llegamos tarde con los clientes, terminamos no entregando en tiempo y forma”, señaló Silva. Un viaje de ida y vuelta que normalmente tomaría menos tiempo puede extenderse a dos días y medio debido a los cortes, algo “totalmente atípico para 300 kilómetros”.
Impacto en el turismo y la economía local
El sector turístico también ha expresado su preocupación. La caída de reservas, excursiones, y consumos, junto con la mala imagen que los cortes generan para la provincia, ha afectado gravemente la economía local. Un informe del Ministerio de Turismo reveló que las empresas del sector han perdido $1.100 millones en los últimos meses debido a los reclamos. Esto daña la reputación de Misiones como destino turístico seguro y hospitalario, generando incertidumbre entre los viajeros.
Recesión económica y reducción de cargas
Silva también destacó que la recesión económica nacional ha provocado una disminución del 40% en el transporte de cargas. “Un chofer que hacía 10.000 kilómetros en el mes con una unidad, hoy está haciendo 5.000 kilómetros. Entonces, esa unidad ya no rinde más, el salario del chofer no le rinde tampoco”, explicó a FM de las Misiones.
El consumo interno está paralizado, afectando industrias clave como la madera, que no se mueve de Misiones debido a la falta de demanda. Esta situación ha llevado a despidos en el sector. Silva indicó que algunas empresas grandes han tenido que despedir empleados, mientras que otras han repartido los fletes entre los conductores restantes, reduciendo significativamente los kilómetros recorridos.
Las empresas más pequeñas o cuentapropistas, que manejan uno o dos camiones, también se ven afectadas. Trabajan menos horas o menos viajes, buscando alternativas para subsistir. “Sí, hay muchas empresas que decidieron despedir, muchas empresas que distribuyeron los kilómetros en el plantel”, especificó Silva.
Inflación y costos
Sobre los costos, Silva mencionó que la recesión ha frenado el incremento de la inflación en la actividad: “La recesión ha hecho que caigan los índices de inflación, nosotros tenemos el índice de transporte que mide todos nuestros costos y mayo ha sido solamente del 2,5%; hace tiempo que no tenemos un índice tan bajo, pero a costa de una recesión terrible, tremenda”.
La situación actual exige soluciones urgentes para evitar un mayor deterioro de sectores vitales para la economía de Misiones y de todo el país. Con información de Primera Edición