El papa León XIV recibió este martes en su residencia de Castel Gandolfo al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, en el marco de su tercer encuentro desde el inicio del pontificado. La reunión, según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, se desarrolló en un clima cordial y tuvo como eje central la situación de la guerra en Ucrania.
Durante la audiencia, el Santo Padre subrayó la urgencia de mantener abierto el camino del diálogo y manifestó su profundo deseo de que las iniciativas diplomáticas en curso puedan conducir a “una paz justa y duradera”. Asimismo, abordó la cuestión de los prisioneros de guerra y la necesidad de garantizar el regreso a sus familias de los niños ucranianos secuestrados durante el conflicto, un tema que la Santa Sede considera prioritario dentro de sus esfuerzos humanitarios.
Una relación diplomática sostenida
Este encuentro marca la tercera reunión entre León XIV y Zelenski. La primera tuvo lugar en mayo, durante la inauguración del pontificado, y la segunda en julio, también en Castel Gandolfo, mientras el Papa se encontraba de vacaciones. En aquella oportunidad, el Pontífice expresó su profundo pesar por las víctimas de la guerra y renovó su compromiso de acompañar espiritualmente al pueblo ucraniano.
En este marco, el Papa reiteró la voluntad del Vaticano de ofrecer un espacio neutral para eventuales negociaciones de paz entre Ucrania y Rusia, reafirmando la disponibilidad de la Santa Sede para facilitar cualquier iniciativa humanitaria o diplomática que contribuya al cese del conflicto.
Tras la reunión de este martes, el presidente Zelenski habló brevemente con periodistas en inglés y agradeció al Papa su constante apoyo. Destacó especialmente los esfuerzos de la Santa Sede por asegurar el retorno de los niños ucranianos desplazados por la fuerza, calificándolo como “una cuestión muy importante” para su gobierno y para las familias afectadas.